La entrega de los premios Oscar impuso tendencias en los colores de los vestidos de gala

El tono nupcial fue sin duda el protagonista de la alfombra roja en la versión número 84 de los premios de la Academia.

El negro es el símbolo tradicional de la elegancia en la noche. Pero las actrices de Hollywood aparecieron decididas a legitimar el blanco como la opción en 2012.

Minimizaron al máximo la gama cromática de sus vestidos de gala, y los 150 metros de lujo y glamour hacia el Teatro Kodak de Los Ángeles tuvieron al blanco impoluto como protagonista.

Las más aplaudida en materia de moda, y quien se llevó el Óscar a la elegancia según los expertos, fue Gwyneth Paltrow, quien lució un vestido asimétrico de Tom Ford. Con una gran sorpresa: una minimalista capa.

'La cita más esperada para las estrellas del cine y los diseñadores es los Premios Óscar, no solo por que en ellos se reviven los momentos mas emotivos del séptimo arte, sino porque se puede apreciar lo mas exclusivo de la moda. Este año, casas de moda como Tom Ford, Elie Saab, Marchesa, Armani, Versace, Zac Posen, Gucci, Dior, entre otros, transformaron la alfombra roja en un tributo al estilo blanco y rojo en vestidos clásicos vintage, y siluetas ceñidas al cuerpo que marcaron tendencia' explica Santiago Giraldo, experto en tendencias y director del programa Flash Fashion de RCN. Otro de los vestidos más ovacionados fue el de Milla Jovovich, un Elie Saab asimétrico con aplicaciones de strass en tono perla. Y el de Rooney Mara, un blanco puro de Givenchy de gran escote. Ambas eligieron un estilo clásico que rememoraba a la actriz Lauren Bacall.

El rojo fue otro tono característico: Michelle Williams, de Louis Vuitton, y Natalie Portman, con un Dior Haute Couture de 1954, añadió el toque más retro con un `palabra de honor` lleno de lunares. La dualidad de blanco y negro, una tendencia de la pasarela de Nueva York, la llevó con detalles de hojas doradas bordadas en hombros y cintura Sandra Bullock, con un vestido de corte sirena y gran cola.