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Hbitación en el Fontainebleau Las Vegas hotel and casino
El Fontainebleau Las Vegas contará con detalles en forma de pajarita, desde las columnas del vestíbulo hasta los tiradores de latón de los cajones de las habitaciones
El magnate inmobiliario Jeffrey Soffer ha esperado 23 años por este momento. El 13 de diciembre, el desarrollador con sede en Florida inaugurará el complejo más nuevo de Las Vegas, un palacio de US$3.700 millones con siete piscinas, 36 restaurantes y bares, así como un club privado en el último piso con espectaculares vistas del horizonte.
Lo que realmente destaca del Fontainebleau Las Vegas no es la altura (con 67 pisos es el hotel más alto de Nevada) o la escultura de 46 pies del artista suizo Urs Fischer en el vestíbulo sur. Es el tiempo que tardó en construirse. Soffer adquirió el terreno en 2000, pero perdió el control del proyecto en su mayor parte realizado durante la crisis financiera de 2008-2009. Dos propietarios más iban y venían, incluido el multimillonario Carl Icahn, antes de que Soffer volviera a adquirir el edificio aún sin terminar en 2021 por una fracción de su costo de construcción original.
"Es una de las grandes y locas historias del sector inmobiliario", dijo el hombre de 55 años mientras caminaba por la propiedad una tarde reciente. “Siempre hay algún loco en tu carrera. Definitivamente es esto”.
Soffer dijo que creía firmemente en el concepto y trajo una versión del resort Fontainebleau de su familia en Miami Beach a la capital del juego de Estados Unidos. El hotel de Florida ha sido un patio de recreo para ricos y famosos desde su apertura en 1954. Diseñado por el arquitecto Morris Lapidus, la propiedad frente a la playa es más notable por su amplia área de piscina, donde James Bond jugó a las cartas contra el villano Auric Goldfinger en la película Goldfinger de 1964 . Soffer dijo que el resort de Miami Beach es uno de los hoteles sin casino más rentables del país.
Al igual que su homónimo de Florida, el Fontainebleau Las Vegas contará con detalles en forma de pajarita, desde las columnas del vestíbulo hasta los tiradores de latón de los cajones de las habitaciones. (Lapidus era fanático de las corbatas). Soffer está importando su exitosa marca de discoteca LIV a la propiedad de Las Vegas. La combinación de colores azul y rosa coral del complejo evoca a su hermano de Miami Beach. Lo mismo ocurre con los muebles de estilo moderno francés de mediados de siglo de las habitaciones.
Soffer planea aprovechar su base de datos de huéspedes de Miami Beach para ayudar a impulsar la propiedad de Nevada.
"Tenemos muchos clientes que van a ambos lugares", dijo. “Te sientas en la playa de Miami Beach y ves aviones con pancartas de Las Vegas”.
Soffer, quien anteriormente estuvo casado con la supermodelo Elle MacPherson y cuenta con el gran futbolista Tom Brady como vecino y amigo, probablemente reclutará a algunos de sus amigos famosos para la inauguración.
"En todas las propiedades exitosas hay una persona carismática a la cabeza", dijo Howard Karawan, quien trabajó con Soffer en su primer intento de abrir el complejo. "Jeff sin duda lo es y tiene un gran círculo de amigos".
El mayor desafío de Soffer probablemente será la ubicación de Fontainebleau en el extremo norte del famoso Strip de la ciudad, lejos de propiedades como el Bellagio y el Caesars Palace, donde los huéspedes pueden pasear más fácilmente de uno a otro. Los casinos del extremo norte, como el Stratosphere y el SLS, que ahora recupera su nombre original Sahara, en ocasiones han tenido problemas financieros.
"Creemos que inversiones importantes, como las renovaciones que hemos completado en Strat, y nuevas propiedades crearán con el tiempo más densidad y tráfico hacia el Strip norte", dijo Charles Protell, presidente de Golden Entertainment, propietario de Stratosphere.
La última gran inauguración del Strip, Resorts World Las Vegas de Genting Group, valorada en US$4.300 millones en 2021, se encuentra casi frente al Fontainebleau. Recientemente ofreció tarifas de habitación entre semana tan bajas como US$99 por noche, incluso cuando el tráfico total de visitantes a Las Vegas ha aumentado a niveles casi prepandémicos. Fontainebleau planea que las tarifas en sus 3.644 habitaciones comiencen en US$300 la noche.
El Fontainebleau será uno de los hoteles más cercanos al centro de convenciones de la ciudad, lo que debería mantenerlo ocupado con huéspedes de negocios entre semana, dijo Soffer. El complejo está construido en un espacio relativamente pequeño para los estándares de Las Vegas: menos de 25 acres. Los huéspedes pueden acceder a la mayor parte de la propiedad a través de un banco central de ascensores. Soffer dijo que sus clientes leales y ricos no están interesados en ir de un casino a otro de todos modos.
"El dinero no camina", dijo.
El padre de Soffer, Donald, que ahora tiene 90 años, inició el imperio inmobiliario familiar y finalmente convirtió un pantano al norte de Miami en Aventura, una comunidad de alto nivel. Después de que su familia comprara el hotel Fontainebleau de Miami Beach en 2005, Soffer comenzó a trabajar en la versión de Las Vegas.
El plan original incluía vender condominios, algo que su familia ya había hecho en Florida y Nevada. Pero el interés de los compradores se evaporó en 2009. Con más de US$2.200 millones invertidos y el complejo en un 70% terminado, los bancos de Soffer retiraron su financiación. El Fontainebleau Las Vegas se declaró en quiebra. Icahn, que vive a tres puertas de Soffer en Florida, lo compró por US$156,1 millones y luego vendió los muebles. En un momento, el edificio vacío se utilizó para formar a los bomberos.
“Le deseo suerte”, dijo Icahn en una entrevista.
El promotor neoyorquino Steven Witkoff adquirió la propiedad de Icahn por US$600 millones, con planes de abrir un complejo llamado Drew Las Vegas. Sus planes fracasaron durante la pandemia de Covid. Soffer dijo que reclamó el proyecto por menos del precio de venta anterior, pero se negó a decir cuánto. Su socio es la rama inmobiliaria de Koch Industries. La financiación de un consorcio liderado por JPMorgan Chase & Co. asciende a US$2.200 millones.
Soffer dijo que costaría miles de millones de dólares más si comenzara desde cero.
"Entonces, ¿por qué no gastar todo el dinero necesario y convertirlo en el lugar más lujoso que tiene Las Vegas?" él dijo.
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