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Los periféricos o el computador no definen las habilidades del jugador a la hora de desempeñarse profesionalmente en E-sports
El origen de los E-sports se remonta a los cibercafés, donde los jugadores intentaban conseguir la mejor puntuación o competir contra sus compañeros para determinar quién es mejor en un determinado juego. Cada E-sport tiene sus propias reglas, con acceso a diferente plataformas online y offline, y están clasificados en varias categorías según la modalidad de cada juego. Según el libro blanco de los E-sports existen ocho categorías macro que son: los moba, los shooters, los battle royale; los juegos de cartas; los juegos de estrategia real; los juegos de pelea, carreras, y por último, de deportes.
Entonces, si usted quiere volverse un profesional en los E-Sports tiene que tener en cuenta lo siguiente. Según Menkian Molina, dueño de una empresa comercializadora de periféricos, usted no necesita específicamente los mejores equipos o los más caros para poder desempeñarse profesionalmente. Sin embargo, es necesario tener en cuenta detalles para que su experiencia al jugar sea mejor. El mouse debe tener un buen sensor, switches y “skates” de calidad, ya que estos son los que permiten deslizar el mouse de una mejor manera. Además, en la cuestión del teclado, también los switches tienen que tener una buena calidad, para aportar mayor rapidez.
Así mismo, los audífonos le deben aportar a usted un buen balance y el mousepad una mejor movilidad. Además de un computador con gráficos integrados, (Ryzen 5600g con 16gb de Ram a 3200Hz), una board que lo soporte (LG v50), una memoria de estado sólido y una pantalla de mínimo 60hz.
Después de tener claros los requerimientos en cuanto a equipo electrónico, es necesario saber que para llegar a organizaciones se necesita pasar ciertos filtros. Según Sebastián Cortez, director de la organización Loto gaming, existen diferentes requerimientos que ellos miran a la hora de seleccionar un jugador. Primero, debe estar posicionado en el top 100 del ranking de jugadores, poseer experiencia competitiva y llevar cierta cantidad de horas jugadas. Luego, hacen un examen para probar sus habilidades y mirar si pueden entrar.El presupuesto requerido puede ascender a los $15.000.000 con los equipos más top. Pero con especificaciones más moderadas se puede arrancar desde $3.400.000.
Si llegan a entrar es necesario someterse a rutinas de entrenamiento definidas por el entrenador del juego en especifico, donde aprenden la teoría también, para posteriormente presentarse a torneos. Dependiendo del juego pueden ser remunerados o no, ya que muchas veces la organización hace un previo acuerdo con el jugador. A veces, si no tienen un salario fijo, la empresa paga gastos de desplazamiento. Y así empezar a pasar las ligas nacionales, las regionales y a las de nivel mundial para posicionarse más en el mercado y poder empezar a vivir definitivamente de los E-sports, logrando que sea rentable.
