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ElevenLabs y Suno AI son algunas de las empresas líderes del mercado que permiten modificar, crear o transformar las voces
Alguna vez ha escuchado alguna canción y se ha puesto a pensar, ¿de verdad esa voz es real? En la mayoría de los casos, sí, pero con la llegada de la inteligencia artificial, la industria musical ha tenido profundos cambios, porque la IA permite mediante herramientas programar crear, modificar y replicar voces humanas.
Estas tecnologías no solo introdujeron nuevas formas de hacer música, sino que también han replanteado las fronteras entre lo humano y lo digital; empresas especializadas en tecnología de voz y generación de audio están desarrollando soluciones que no solo asisten a artistas en sus procesos de creación de canciones, sino que también están ayudando a moldear nuevos formatos de producción sonora en la industria.
Plataformas como ElevenLabs, Suno AI, Voicemod y Harmonai han comenzado a ofrecer servicios que permiten generar voces realistas a partir de texto o sonidos de referencia. Estas herramientas son empleadas, tanto por los músicos emergentes como por grandes productoras, ya sea para producir nuevas canciones, simular coros o incluso construir artistas virtuales desde cero.
“La Ley 23 de 1982 establece que el autor es la persona natural que realiza la creación intelectual mientras que la norma andina define al autor como la persona físicaque realiza la creación de una obra”.
El profesor de la facultad de ingeniería de la Universidad Javeriana, Carlos Alberto Parra Rodríguez, dijo que este tipo de herramientas cada vez permiten mayores posibilidades y es el ser humano el que decide cómo utilizarlas para su beneficio en el crecimiento de una industria como la musical.
Sin embargo, esta innovación también plantea desafíos legales en algunos aspectos, por ejemplo, derechos de autor y el uso ético de las voces. En algunos casos, se han generado conflictos debido al uso no autorizado de las voces para producir canciones sin consentimiento.
Por esta razón, los desarrolladores y creadores de voces a través de la inteligencia artificial han comenzado a incorporar una serie de filtros, licencias y modelos de verificación que lo que hacen es evitar que las tecnologías se empleen con fines indebidos o que se logre suplantar la identidad de algún cantante para otras disqueras o empresas de la industria musical.
“En cada una de las aplicaciones se tienen diferentes protecciones como referentes que han sido legislados, dadas por el derecho de autor. Este tipo de uso es estudiado en Colombia para proteger la producción de nuevas obras, en particular una producción musical realizada con inteligencia artificial no tiene copyright, en cambio si es el humano el que hace uso para mejorar o introducir partes a una nueva obra, este si se considera que posee un copyright en su producción”, aseguró Parra.
Aunque el protagonismo de artistas virtuales no supera al de los tradicionales, ya es posible en muchas plataformas encontrar canciones de voces sintéticas en plataformas de streaming como Spotify, YouTube, Soundcloud, entre otras con millones de reproducciones.
Más allá de la generación de voces nuevas, la inteligencia artificial también ha sido implementada para remasterizar producciones antiguas, mejorar su calidad de sonidos y explorar nuevos efectos sonoros.
A pesar del gran auge que está teniendo la inteligencia artificial en todos los aspectos, se espera que en la industria musical no se vea afectada en términos de conciertos y conexión con los oyentes ya que, la creatividad, espectáculos en vivo, entre otros, seguirá ligada a la mente humana.
Esta tecnología se perfila como una herramienta que puede ser utilizada como un apoyo para agilizar los procesos de creación y edición, también ayuda a expandir alternativas de realización de producciones musicales y su variedad en las formas de creación. Sin embargo, aún necesita y es dependiente de la intención, sensibilidad y decisión que le brinda el ser humano.
La industria musical está viviendo un gran cambio que puede traer consigo grandes beneficios si se usa de gran manera. La IA brinda demasiadas posibilidades para la creación y edición de voces, sonidos, entre otras cosas más; esta herramienta puede utilizarse para grandes cambios en la industria que permitan nuevos sonidos.
Ben Gaya, el primer cantante hecho con IA
Este es un artista creado completamente con inteligencia artificial por agencias europeas. Su identidad, imagen, voz y canciones han sido generadas mediante herramientas de IA, incluyendo además de su voz, programas de diseño visual. Por esta razón, el artista cuenta con presencia en redes sociales y se presenta como un personaje con identidad digital, no como una persona real. A pesar de ello, cuenta con perfiles oficiales en Instagram y YouTube, donde se destaca su dominio de varios idiomas, lugar de nacimiento, residencia y su mascota: Russell.
