Para The Economist, a las Farc toca ganarles con votos en las próximas elecciones

Los problemas que está teniendo la implementación del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y los desmovilizados de las Farc son culpa de un Estado débil. Así lo consideró en su última publicación, la revista británica The Economist que reseñó la incursión en política de la otrora guerrilla más antigua del continente.

En su artículo, la publicación resaltó que es hora de que los políticos dejen de considerar a los miembros del nuevo partido político como terroristas y enfrentarlos en las próximas elecciones. “El futuro de Colombia sería más brillante si los políticos pudieran acordar que los líderes de las Farc ya no son terroristas”, escribió en su última edición impresa en un artículo titulado ‘La guerra de la rosa’, haciendo alusión al nuevo logo del partido político de las Farc.

The Economist también le sugirió a Estados Unidos que un espaldarazo en esa dirección sería dejar de incluir al grupo en su lista de organizaciones terroristas, tal como lo hará la Unión Europea, y aclaró que, si bien los líderes guerrilleros merecen “el desprecio de los colombianos”, la mejor manera de demostrárselo es votar en contra de ellos.

La revista londinense también llamó la atención sobre las propuestas de algunos candidatos de echar para atrás lo acordado y advirtió las consecuencias que esto podría tener. “Eso es peligroso. Si el intento tiene éxito, más excombatientes podrían unirse a desertores armados; las perspectivas de un acuerdo con el ELN, que ahora está observando un alto el fuego, se desvanecerán”, dijo.

Además, advirtió que aunque el gobierno puede conseguir los suficientes votos en el Congreso para sacar adelante las reformas necesarias para implementar el acuerdo, entre ellas, la aplicación de la Jurisdicción Especial para la Paz, continuarán los ataques a la “legitimidad política” de las Farc y se podría dar el escenario en el que el próximo presidente afecte lo acordado en La Habana con, por ejemplo, la retención de los recursos necesarios para ponerlo en marcha.

“Ahora la pelea es sobre la legislación para implementarla. Pase lo que pase, el debate sobre si las Farc son o no aptas para la política continuará a través de las elecciones, que pueden ser las más amargas en años”, reseñó la publicación.

Pese a esto, la revista consideró que la candidatura presidencial de Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’, y la posibilidad de que llegue ser presidente “es absurda”, teniendo en cuenta el rechazo que muestran los colombianos en las encuestas y que el mismo ‘Timochenko’ estaba enfermo en La Habana cuando se hizo el anuncio de su candidatura. “Aunque Timochenko no tiene ninguna posibilidad, otros líderes de las Farc serán elegidos para el Congreso. El partido tiene garantizados diez escaños para los próximos dos ciclos electorales bajo el acuerdo de paz firmado el año pasado”, recordó.