Nevada paralizó noreste de Estados Unidos pero fue menos fuerte que lo previsto

Con expectativas de vientos violentos de hasta 120 kilómetros y en ciertas zonas donde la nieve podría llegar a 50 centímetros, Nueva York logró superar con éxito la tormenta de nieve que se pensaba iba a ser peor.

Estos pronósticos llevaron a gobernadores de ocho estados de la costa este a declarar emergencias. La situación más complicada se registró ayer en la mañana en otras zonas. Por ejemplo, la nieve superaba 30 centímetros de altura en Massachusetts, mientras que en Playmouth se registraron casi 16 pulgadas (40 centímetros), en Shewsbury aproximadamente 15 pulgadas (38 centímetros).

La tormenta en Nueva York se desató con fuerza antes de la medianoche, afectando a cerca de 30 millones de personas de la costa noreste de Estados Unidos, desde el estado de Nueva Jersey hasta el de Maine, en la frontera con Canadá.

La preocupación se centró en este estado, debido a que es el principal centro financiero mundial y sede de Naciones Unidas, cuyas reuniones fueron canceladas el lunes por la tarde, aunque Wall Street siguió operando normalmente. El lunes se prohibió la circulación de vehículos, medida que quedó levantada para Nueva York y otros condados vecinos desde las 7:30 de la mañana de ayer.

“Lo peor ya pasó y prefiero estar en la situación de que tuvimos suerte que en otra en la que digamos que no tuvimos suerte y gente murió. Gracias a que estaban libres las calles, los equipos quitanieves pudieron trabajar, y así el sistema podrá volver a la normalidad con más rapidez”, afirmó en una rueda de prensa el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.

Como medida preventiva se cancelaron más de 7.700 vuelos de aerolíneas como American Airlines, Delta, JetBlue, Southwest, US Airways y Avianca, desde el sábado y hasta el martes. Incluso, muchos que se estimaban para hoy no pudieron despegar.

La población inundó supermercados para comprar no solo implementos para la nieve como palas o sal para la ruta, sino productos de consumo diario para afrontar el encierro.

Aunque se decidió suspender clases en las escuelas y algunas jornadas laborales, se hizo énfasis en que el servicio de electricidad podría dañarse por exceso de nieve y se canceló el servicio de buses y trenes. Sin embargo, durante la jornada de ayer se fueron cancelando estas medidas.

Hasta el baloncesto quedó aplazadopor tormenta June La fuerte tormenta de nieve que avanza sobre todo el estado de Nueva York, incidió para que la NBA anunciara el aplazamiento de los partidos de liga que más tarde jugarían los Knicks y los Nets. Los Knicks de Nueva York debían jugar contra los Kings de Sacramento y los Nets de Brooklyn contra los Trail Blazers de Portland. El partido que los Knicks iban a jugar contra los Kings en el Madison Square Garden fue reprogramado para el 3 de marzo. Los Nets, que debían recibir ayer a los Trail Blazers en el Barclays Center, de Brooklyn, jugarán el próximo 6 de abril.