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Futuros de acciones en Australia y Hong Kong apuntan a pérdidas tempranas el lunes, mientras que los de Japón y China subieron.
Las acciones asiáticas se preparan para un comienzo cauteloso en un mes históricamente volátil para los mercados, a medida que aumentan las señales de que los esfuerzos de China para apoyar a su economía en crisis aún no han dado resultados.
Los futuros de acciones en Australia y Hong Kong apuntan a pérdidas tempranas el lunes, mientras que los de Japón y China subieron. Los contratos estadounidenses registraron pocos cambios después de que el S&P 500 cerrara con un alza de 1% el viernes antes de un reequilibrio del índice MSCI y de que los datos respaldaran las expectativas de inminentes recortes de tasas por parte de la Reserva Federal.
El dólar y el euro cotizaban estables el lunes por la mañana, después de que los partidos populistas de extrema derecha e izquierda parecían encaminados a ganar dos elecciones regionales en Alemania. En los mercados de materias primas, el petróleo bajó levemente y el oro apenas registró variaciones.
Los operadores se centrarán en el PMI manufacturero de China de Caixin, que se publicará el lunes, después de que el indicador oficial de la actividad fabril se contrajera por cuarto mes consecutivo en agosto, la última señal de que la economía del país podría tener dificultades para cumplir el objetivo de crecimiento de este año. La caída del sector residencial de China también se profundizó el mes pasado.
“Es necesaria una mayor flexibilización fiscal para ayudar a asegurar el objetivo de crecimiento anual de 'alrededor de 5%'”, escribieron los economistas de Goldman Sachs Group Inc. encabezados por Lisheng Wang en una nota el domingo. “En comparación con el primer semestre, esperamos que la política macroeconómica interna sea más favorable en el segundo semestre, especialmente en el frente fiscal, aunque la magnitud de la flexibilización debería ser aún menor que la de los principales ciclos de flexibilización anteriores”.
Septiembre es históricamente un mes volátil para los mercados globales. Ha sido uno de los peores meses para las acciones en los últimos cuatro años, mientras que el dólar generalmente supera sus expectativas, según datos compilados por Bloomberg. El indicador de miedo de Wall Street, el índice de volatilidad Cboe, o VIX, ha aumentado cada septiembre en los últimos tres años, según muestran los datos.
Este mes puede que no sea diferente, ya que el crucial informe sobre empleo de Estados Unidos que se publicará a finales de esta semana servirá como guía para saber con qué rapidez (o lentitud) la Reserva Federal recortará las tasas, y mientras la campaña electoral estadounidense está en pleno apogeo. Un operador o varios operadores de opciones gastaron más de US$9 millones para protegerse contra un aumento del VIX este mes.
“La estacionalidad de septiembre tiene un historial irregular, ya que el riesgo no es poco común y, en años electorales, es más dramático”, dijo Bob Savage, director de estrategia y análisis de mercados de BNY en Nueva York. “La semana que viene comienza el fin de año. Tiene los ingredientes para ser problemático, dado que los datos económicos de los EE. UU. y el resto del mundo ahora son importantes para la evolución de las curvas de tasas y la valoración de los mercados de divisas”.
Las acciones estadounidenses subieron el viernes luego de que un informe mostró que la confianza del consumidor mejoró por primera vez en cinco meses, ya que la desaceleración de la inflación y las perspectivas de recortes de la Fed ayudaron a elevar las expectativas sobre las finanzas personales. La medida preferida de la Fed para la inflación subyacente en Estados Unidos -el índice de precios de los gastos de consumo personal básico- subió a un ritmo moderado.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años subieron cuatro puntos básicos hasta 3,9% y el dólar subió a medida que los datos erosionaron el respaldo a una reducción enorme de las tasas de interés en septiembre. Los operadores están descontando que el ciclo de flexibilización de la Fed comenzará este mes, con una probabilidad de aproximadamente una en cuatro de un recorte de 50 puntos básicos, según datos compilados por Bloomberg. Los bonos del Tesoro en efectivo están cerrados a nivel mundial el lunes por el feriado del Día del Trabajo en Estados Unidos.
En otros lugares de la semana se darán a conocer los datos de la actividad económica en Europa y las lecturas de inflación en Asia, mientras que los bancos centrales de Chile, Malasia y Canadá tienen previsto reunirse. El informe de nóminas no agrícolas de Estados Unidos se dará a conocer apenas horas antes de las últimas declaraciones del gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, antes de que el banco central entre en su período de suspensión de pagos.
“Tácticamente, las buenas noticias deberían ser buenas noticias para los activos de riesgo” y un informe de empleo mejor de lo esperado probablemente impulsará las acciones y el dólar, dijo Chris Weston, jefe de investigación de Pepperstone Group en Melbourne. “Un recorte de 25 puntos básicos es la medida que la Fed realmente quiere tomar, por lo que una mayor evidencia de que la economía estadounidense se encamina hacia un aterrizaje suave, en medio de recortes de tasas no urgentes, juega un papel clave en el nirvana del riesgo”.
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