Las dos salidas para Theresa May tras rechazo del parlamento a su plan de salida

La primera ministra Theresa May, enfrentó la que sería la peor derrota del Gobierno británico en el Parlamento durante el siglo XXI. Después de más de dos años debatiendo, los legisladores le dieron la espalda a la ruta de salida que negoció la líder con Bruselas, quien está obligada a presentar un plan alternativo a los congresistas antes del próximo lunes.

“Resuelvan la pregunta de nuestra retirada y podremos avanzar en la creación de una nueva relación con Europa. Apoyen el acuerdo y esa labor podrá empezar el miércoles. Fracasen y nos enfrentaremos al riesgo de irnos sin un acuerdo o el riesgo aún mayor de no irnos”, dijo la Primera Ministra antes de la votación.

Son dos los caminos que tiene el Gobierno para evitar una catástrofe económica antes del 29 de marzo. El primero, es diseñar un plan alternativo antes de la siguiente semana que sea aprobado por el Parlamento y aceptado por la Unión Europea. El segundo, es lograr una conciliación con la Eurozona para que flexibilice los términos de su salida.

“Diseñar un plan alternativo antes del lunes es una misión imposible teniendo en cuenta la magnitud del proceso y todo lo que está en juego. Además, el capital político de May es muy limitado y sería un milagro que obtenga una victoria en el parlamento con las divisiones que existen”, explicó Michael Hart, tutor de relaciones políticas en la Universidad de Exeter.

Ante este panorama, la Eurozona tendría el sartén por el mango y podría decidir si renegocia el acuerdo o no, lo que obligaría al Reino Unido a abandonar sin una ruta de salida.

“La Unión Europea ha sido enfática en que no va a revisar los puntos alcanzados, por lo que también sería un milagro si cedieran ante un nuevo plan. Esto también se ve empañado por la forma aplastante en que perdió el plan, lo que significa que los parlamentarios quieren cambios de fondo y no superficiales”, agregó Hart.

Según el Banco Central de Inglaterra, una salida sin acuerdo sería catastrófica para el Reino Unido, que se vería enfrentado a una depreciación de 25% en la Libra Esterlina, una inflación de 6,5% y una reducción en el PIB de 8%, efecto que empezaron a sentir los mercados ayer y se espera que para hoy los principales indices bursátiles tengan una reacción a la decisión.

“Las consecuencias económicas del Brexit a largo plazo dependerán de la naturaleza de las relaciones comerciales futuras. La reducción en la apertura disminuirá la capacidad económica del país y por ende sus conexiones con el comercio”, señaló Mark Carney, gobernador del Banco Central de Inglaterra.

A esta coyuntura se suma una enmienda constitucional según la cual sería ilegal que el país abandone sin un acuerdo, y plantearía la posibilidad de que el Gobierno desconozca el referendo popular que los llevó a iniciar el proceso.

“Sería difícil que esto suceda sin que se haga otro referendo popular. Ya han pasado más de dos años y medio en que las partes no se ponen de acuerdo con el Brexit, así que la división sería enorme y el resultado impredecible”, explicó Patrick O’ Neill, socio principal de Sherlock Communications.

Fuentes cercanas a Bruselas indicaron que la organización se prepara para extender el plazo del Brexit hasta junio y estaría dispuesta a revisar los nuevos términos que propondría el Reino Unido.

“El acuerdo planteado debería mantenerse tal y como está. No obstante, nos preparamos para iniciar nuevas negociaciones. Si hubiera un mejor acuerdo que el que está sobre la mesa, ya se habría planteado”, comentó el ministro alemán de asuntos exteriores, Heiko Maas.

Divisiones Políticas

Después de la votación, que quedó 432 votos en contra y 202 a favor, la Ministra se dirigió a los representantes y les dijo que presentará el nuevo plan el próximo lunes, fecha estipulada por el Parlamento.

“Este Gobierno escuchó al Parlamento y está interesado en reflejar sus preocupaciones. Por eso, presentaremos una alternativa el lunes para que podamos avanzar en bloque y dejar atrás las divisiones”, señaló May. La derrota del Gobierno fue tan estrepitosa, que los opositores del Partido Laborista presentaron de inmediato una moción de censura contra el ejecutivo.

“Ningún trato debe descartase, pero se debe garantizar que cumpla con los intereses de todo y este Gobierno solo ha actuado a favor de los suyos”, dijo Jeremy Corbyn, líder del partido Laborista.

Al respecto, la líder del gobierno indicó que asistirá al debate y que su cartera examinará la confianza con la que el Parlamento está tomando el tema, teniendo en cuenta que la fecha de retiro se aproxima.

La pelota vuelve a quedar en el campo de la Unión Europea, mientras analistas consideran que de darse un nuevo acuerdo el Brexit sería un “saludo a la bandera”.