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Para muchos comerciantes de acciones, parecía correcto que el mercado tomaría un respiro después del dramático repunte de los últimos días
Después de un rebote que comenzó alrededor del mediodía en Nueva York y se atribuyó a un gran comercio de opciones, el S&P 500 volvió a bajar. Para un mercado plagado de temores sobre una recesión y las luchas de la Reserva Federal para controlar la alta inflación, el repunte desde el fondo de este año quizás haya ido demasiado lejos muy rápido.
En términos fundamentales, nada ha cambiado tanto como para que el banco central de EE. UU. se incline hacia un sesgo más moderado para evitar un aterrizaje forzoso. De hecho, lo que obtuvo Wall Street el miércoles fue una renovación de la determinación inquebrantable de los funcionarios de la Fed de aplastar la inflación.
El presidente del Fed Bank of Atlanta, Raphael Bostic, dijo que está a favor de elevar las tasas a entre 4% y 4,5% para fines de este año, y luego mantener el ajuste. También se hizo eco de los comentarios de su homóloga de San Francisco, Mary Daly, quien restó importancia a las especulaciones sobre recortes de tipos en 2023.
Para Win Thin en Brown Brothers Harriman, la noción de cualquier pivote de la Fed es solo una "ilusión", ya que los funcionarios de la Fed siguen siendo agresivos. Él dice que otro aumento de 75 puntos básicos el próximo mes es un "trato hecho".
"Durante las últimas sesiones, el precio del mercado fue demasiado rápido en la historia de la 'tasa máxima' en los mercados", dijo Bipan Rai, jefe de estrategia de divisas de América del Norte en CIBC. "Se prevé que las presiones de los precios se mantengan rígidas durante algún tiempo y, si bien la Fed podría estar más cerca de hacer aumentos incrementales más pequeños, jugar esto a través de una vista de 'tasa máxima' es bastante arriesgado".
Matt Maley, de Miller Tabak, dice que la amplitud extremadamente positiva del reciente repunte de las acciones es probablemente algo que nos dice que el repunte se tomará un "respiro" durante uno o dos días, pero podría no significar que el rebote haya terminado.
“Sí, los 'repuntes del mercado bajista' pueden ver fuertes avances que se revierten casi de inmediato, por lo que lo que hemos visto en los últimos dos días podría ser la máxima falsificación”, agregó Maley. "Sin embargo, si el mercado de valores puede digerir sus ganancias de los últimos dos días sin una reversión importante en los próximos días, es probable que veamos un poco más de seguimiento alcista del rebote de esta semana en poco tiempo".
Si la historia sirve de guía, "los mercados necesitarán experimentar más estrés" antes de un giro en la política monetaria y un fondo de acciones, escribieron los estrategas de Wells Fargo & Co. dirigidos por Christopher Harvey. El índice de volatilidad de Cboe todavía cotiza por debajo de 40, un umbral que en el pasado indicaba un cambio hacia la relajación monetaria.
Las acciones estadounidenses acaban de registrar una rara racha de caídas trimestrales y se encuentran en un mercado bajista, pero los estrategas cuantitativos de Citigroup Inc. dicen que apenas comienzan a reflejar los riesgos de una recesión .
Un equipo dirigido por Hong Li dijo que las acciones podrían verse sometidas a una mayor presión, ya que continúan siendo "fuertemente impulsadas" por la mayor volatilidad del mercado de bonos, así como por las preocupaciones sobre la inflación persistente y la Fed agresiva.
Hay "más riesgo a la baja para el mercado y la temporada de ganancias", escribieron.
Los inversores minoristas, que ayudaron a impulsar las acciones a máximos históricos, ahora están probando una táctica diferente: apostar contra el mercado .
De enero a agosto de este año, incluso antes de la caída más reciente de las acciones, la cantidad de posiciones cortas recién abiertas en la plataforma de negociación eToro fue un 61 % más alta que en 2021 y un 41 % más alta que en 2020. Mientras tanto, algunas de las bolsas más grandes de EE. UU. -Los fondos negociables que apuestan contra los índices populares están acumulando cantidades récord de efectivo.
La incertidumbre de los inversionistas sobre la salud de las empresas estadounidenses está aumentando, y sus líderes no han hecho mucho para ayudar. La falta de una hoja de ruta precisa para la temporada crucial de ganancias está preparando el escenario para una gran cantidad de posibles sorpresas cuando comience la temporada de informes en las próximas semanas.
Aparte de los pocos que brindan números fríos y duros, los ejecutivos de las 1,000 firmas más grandes de EE. UU. han pasado los últimos tres meses expresando un mensaje similar en sus comentarios públicos: no están seguros de lo que se avecina. Han mencionado "incertidumbre" o sus sinónimos al describir la perspectiva 484 veces durante ese tiempo, el recuento más alto desde el trimestre que finalizó en marzo de 2021, según muestran los datos compilados por Bloomberg.
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