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Lighthizer y el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, se encuentran en Pekín para una nueva ronda de negociaciones de alto nivel con el viceprimer ministro chino, Liu He
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, considera extender en 60 días el plazo para subir aranceles a importaciones chinas, mientras las dos mayores economías mundiales intentan negociar una solución a su disputa comercial, según personas cercanas al tema.
El mandatario afirmó el martes estar dispuesto a ignorar el plazo del 1 de marzo para duplicar con creces los aranceles a productos chinos equivalentes a US$200.000 millones si ambos países se acercan a un acuerdo que incluya cambios estructurales profundos en las políticas económicas chinas, aunque precisó que no está "interesado" en hacerlo. Las fuentes señalaron que Trump evalúa ampliar el plazo actual para dar más tiempo a las negociaciones.
"Creo que van muy bien", declaró Trump esta semana a los medios en la Oficina Oval. "Nos están mostrando un tremendo respeto".
Una vocera del representante comercial de EE.UU., Robert Lighthizer, declinó hacer comentarios.
Autoridades chinas propusieron inicialmente una extensión de 90 días, lo cual fue rechazado por los negociadores estadounidenses, añadieron personas conocedoras de dicha solicitud.
Lighthizer y el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, se encuentran en Pekín para una nueva ronda de negociaciones de alto nivel con el viceprimer ministro chino, Liu He, el jueves y el viernes. Se discute tentativamente programar para esta semana un encuentro entre Lighthizer y el presidente chino, Xi Jinping. La disposición de Trump a extender el plazo puede depender del resultado de esa reunión, aclaró una de las fuentes.
Trump ha comentado que deberá reunirse con Xi para sellar un acuerdo definitivo. Si bien no se ha fijado una fecha, un asistente de la Casa Blanca dijo esta semana que el jefe de Estado aún está dispuesto a reunirse con su homólogo chino pronto con la idea de poner fin a la guerra comercial.
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