MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Por costos adicionales en la producción como transporte e insumos, piden a los compradores de la fruta responsabilidad compartida
Por el fuerte incremento de los costos en la producción, los productores y exportadores de banano de Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, República Dominicana y Costa Rica lanzaron un llamado a los compradores de la fruta a nivel mundial a adoptar el concepto de responsabilidad compartida, para evitar grandes efectos en la rentabilidad y productividad del banano en sus territorios.
“La industria bananera de la región ha experimentado importantes incrementos de costos a causa del aumento de precios de insumos indispensables como fertilizantes, en 35% a 45%; cartón, en 30%; y plástico, en 45%; costos que impactan directa y negativamente sobre la sostenibilidad económica y competitividad de la industria”, aseguraron la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador, la Asociación de Comercialización y Exportación de Banano de Ecuador, la Asociación de Bananeros del Magdalena y La Guajira, entre otras.
Adicionalmente, advirtieron que “de manera inconsecuente con la realidad mundial, el precio del banano ha sufrido en 2021 el decrecimiento más catastrófico de los últimos 10 años, llegando a 10 euros por 18.5 kilos”.
José Zúñiga, CEO de Asbama, le explicó a LR que “se están presentando unos costos adicionales en la cadena de valor en la producción de banano, y cuando hablamos del tema de responsabilidad compartida siempre tratamos de que ese tipo de impacto se reparta en toda la cadena, porque lo que está pasando es que los precios no los aumentan hace más de cinco años, pero si tenemos insumos y operaciones más costosas”.
Los niveles de empleo se mantuvieron prácticamente sin cambios, como consecuencia de la reticencia de las empresas a contratar
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, dijo que se reunió con Trump para recomendarle que amplíe la prohibición de viajes vigente
Sheinbaum realiza su primer viaje a Estados Unidos como presidenta en un momento en que su gobierno aún negocia con Trump sobre los aranceles que impuso a los productos mexicanos