La población rural en Colombia supera los 12 millones de personas, de las cuales 48% o casi 6 millones de personas son mujeres, siendo Antioquia, Cauca y Nariño donde se concentra la mayor presencia de mujeres rurales.
En las zonas rurales de Colombia hay en promedio casi 4 millones de hogares, y 1,3 millones, según el Dane, están encabezados por una mujer. Y en la mayoría de los casos (67,6%) la mujer que es jefe de hogar no tiene cónyugue.
A nivel educativo, solo 7,9% de las mujeres rurales tiene educación superior o posgrado. Un 11,2% de las mujeres rurales entre 6 y 21 años que no estudia, dice que no lo hace porque debe encargarse de los oficios del hogar y un 27,7% indica que es por falta de dinero o porque los costos educativos son elevados.
En 2021, 33,7% de la población en zonas rurales que habita en hogares con jefatura femenina estaba en situación de pobreza multidimensional y 48,6% estaba en condición de pobreza monetaria. Y si hablamos de ingresos, el de la mujer rural promedio asciende a $502.568, una suma que es inferior en 28,4% frente al salario de un hombre rural. En desempleo, la tasa en mujeres es de 15% mientras que en hombres es más baja, de 6%; y el gran tema es que 93% de las mujeres rurales realizan actividades de trabajo no remunerado.
Todas estas cifras son un indicativo del valor que tiene la mujer en el campo y del doble y hasta triple esfuerzo que debe hacer conquistar sus metas: sacar adelante un hogar, generar ingresar y en algunos casos hacer empresa.
Esa es la razón por la que el diario La República y su publicación especializada AGRONEGOCIOS, ha decidido reconocer a la Empresaria del Agro, Mujer Rural, una distinción que por segundo año consecutivo resalta a las figuras del agro colombiano que aportan al crecimiento económico.
