¿Cómo disminuir los gastos hormiga sin afectar la frecuencia de actividades diarias?

El escenario actual ha hecho que los bolsillos sientan una contracción en los ingresos y, por consiguiente, en el poder adquisitivo. El aumento del dólar se ve reflejado en los gastos hormiga, esos pequeños pagos que se hacen en bienes no esenciales que, aunque no impliquen grandes montos, impactan las finanzas personales. Con el alza en el precio del dólar en Colombia, ahora estos gastos le cuestan 23% más que al inicio del año, cuando la Tasa Representativa del Mercado (TRM) estaba en $3.981,16. Ayer, el dólar cerró a $5.013 en promedio.

Los gastos hormiga suelen ser pequeñas compras que, sumadas, dan como resultado una gran cifra evacuada que impacta sus finanzas mensuales, e incluso en sus cuentas anuales. Para expertos consultados, este suele ser un gasto no pensado que persigue el impulso de evadir algunas cosas que hacen que el gasto sea excesivo y desmedido.

Según Mónica Higuera, economista y experta en finanzas personales, "el problema no radica en que se gaste en este tipo de cosas, sino en no tener estos desembolsos dentro de un presupuesto, debido a que se tiene que sacar de otro rubro y va a dejar un hueco en otras cosas que se deben pagar".

Pero, ¿cómo evitar este tipo de gastos sin dejar de realizar las actividades habituales. Principalmente, con organización y planeación. Es indispensable llevar un registro y comenzar a identificar el dinero que gasta diariamente.

Para esto puede valerse de algunas apps, como Monefy o Fintonic, que además registran el porcentaje de cada categoría de gasto, como transporte o alimentos. Luego, realizar un presupuesto mensual para diferenciar todos los gastos programados y así saber si se cuenta con un respaldo o no.

Los gastos hormiga en su mayoría se componen de bebidas, snacks, dulces, postres y demás productos de precio bajo pero con un impacto a largo plazo. Por esto, llevar un termo de café, de agua y snacks para el día es un consejo clave para disminuir el gasto.

Cocinar en casa es una doble ruta: se pueden migrar los almuerzos/cenas a casa, y además, se puede preparar la comida por porciones y llevar al trabajo, por lo que se podría dinamizar el plan que incluye una cerveza o un postre luego de la oficina.

Y por último, es crucial tener en cuenta las pequeñas comisiones de los bancos por el uso de las tarjetas de crédito, transacciones y demás acciones que representen un cobro de uso.