Marcas hallan en muros nueva forma de publicidad

En la Calle 26 con Carrera 15 se alza un edificio diferente a todos los demás, no porque sea nuevo ni más alto, sino por el llamativo graffiti “El beso de los invisibles” que ocupa los ocho pisos de la construcción.

Tras esta expresión cultural y artística se esconde una empresa dedicada a embellecer las ciudades a través del arte callejero e involucrando a las marcas con una nueva propuesta de publicidad.

La firma Vértigo Graffiti, que lleva ya 5 años de haber sido fundada, por el administrador Alejandro Cárdenas y el abogado Camilo Fidel López, encontró la forma de transformar la publicidad exterior en una pieza cultural con un anunciante detrás, sin romper ninguna regla.

Existen muchas formas en que las marcas participan de la elaboración de los graffitis. Por ejemplo, detrás de “el beso de los invisibles”, mural que representa una foto tomada a una pareja en el bronx , estuvieron dos empresas asesoradas por Vértigo Graffiti.

Home Center y Seven seven participaron del proceso. El retailer de materiales de construcción del grupo Sodimac demostró que todo lo necesario para hacer un graffiti o mural se puede conseguir en sus tiendas, ya que los materiales para realizar la pieza fueron auspiciados por la firma, desde la protección hasta las pinturas e instrumentos para llevar a cabo la tarea realizada por 8 artistas de Vértigo.

Seven Seven con el resultado de la pieza estampó camisetas para su comercialización.

La obra tuvo gran despliegue en redes sociales donde las marcas fueron destacadas.

Otro caso destacado fue el del patrocinio de Bon Yurt con el que la firma de publicidad creó la pieza llamada “Prisma Afro”, la obra se plasmó en la fachada del Hotel Stil ubicado en la plaza Benkos Bioho (antigua Plaza Telecom) en el barrio la Matuna en Cartagena.

Vértigo también ha trabajado con El Círculo de la moda y con Coca-Cola entre otras marcas.

Graffitis ¿legales o ilegales?
La regulación de publicidad en exteriores, cuyo mayor representante es la Secretaría Distrital de Ambiente de Bogotá (en el caso de la capital) es bastante enfática en dónde se puede y no se puede poner pauta, además de esto regula tamaños, espacios, proporciones de los avisos, las vallas, letreros, afiches y demás anuncios que contengan la promoción de marcas.

Entre otros aspectos prohíbe los anuncios en los muros, los puentes, los andenes, los postes y demás, a pesar de que hoy en día están llenos de estos materiales.

Los graffitis son considerados parte de la expresión artística y urbana, además de una manifestación cultural por lo que son más fáciles de manejar en espacions públicos, siempre y cuando estos tengan el permiso y el aval, primero del dueño del muro y segundo de una entidad que lo confirme. Por último, es requisito que este no haga mención de marcas o por lo menos que ésta no ocupe todo el muro.

Vértigo Graffiti encontró la forma de embellecer la ciudad y hacer negocio. A través de una estrategia de publicidad diferente.