“La industria de ensamble de carros puede verse reducida a su mínima expresión”

El Gobierno debe poner especial atención a la industria automotriz si no quiere ver disminuido uno de los sectores más dinámicos del país.

Así lo aseguró el presidente de Renault-Sofasa, Luis Fernando Peláez, quien puntualizó durante un Inside con LR las cuatro tareas pendientes para sacar a flote el ensamblaje local de vehículos: importación de autopartes con cero arancel, esquema de exportación autosostenible, modernización de proveedores y aumento de la demanda.

La Duster lidera el nicho de los SUV. ¿Esto ayudará a que 2013 sea un año de venta récord?
El mercado automotriz este año va a estar cercano a 2012. Para finales de 2013 la cifra de vehículos matriculados estará entre 276.000 o 280.000. Este año ha sido muy importante, va a ser uno de los de más participación de mercado en el país. Estamos en este momento con 16% de participación y a fin de año vamos a vender 45.000 o 47.000 vehículos de toda la gama Renault, dentro de las cuales Duster ha sido un elemento muy importante. Ensamblaremos 25.000 o 30.000 unidades adicionales para las exportaciones.

¿Por qué razones no se llegó a la meta de 300.000 unidades?
El mercado de este año versus el año anterior va a estar 2% ó 3% por debajo. Eso quiere decir que se van a comercializar 2.500 o 3.000 unidades menos que en 2012, y para un año, eso no es una debacle. Este freno se explica por varias cosas: una, es que de 10 vehículos que se venden en Colombia seis son financiados y en el tema de la financiación las tasas han aumentado de 12% a 14% ó 16%; además, el rechazo de los créditos por parte de las entidades ha crecido: de cada 10 créditos rechazan 4. La segunda razón es la confianza del consumidor en el país que está a niveles de 2009, cuando la economía en general estaba cayendo. Y la tercera razón, de la que se habla pero yo discrepo, es el impacto de los TLC, pues la gente pensaba que los carros tendrían una drástica caída de los precios.

¿Qué tendría que hacer Renault-Sofasa para alcanzar el primer lugar en ventas?
Ya somos la marca numero dos que más vende en el país y eso lo conservaremos en 2013. Para llegar a ser la número uno tenemos que hacer un trabajo importante. Primero, tener un mayor cubrimiento del mercado; estamos entre el 80% u 85% de cubrimiento y tendríamos que incursionar en pick ups y vehículos industriales. Ese es un proceso que demanda tiempo e inversiones y que se darán en la medida en que haya una masa crítica para que las inversiones sean rentables, pero no ser los primeros no es algo que me trasnoche.

Ya invirtieron en la Duster, ¿qué otras inversiones tienen planeadas en la planta en Envigado?
En 2012 invertimos aproximadamente US$31,5 millones en el paquete industrial para la Duster: fábrica y proveedores. Hacemos una inversión anual de US$13,7 millones y esto va a continuar. Tendremos inversiones puntuales en la medida en que proyectos de nuevos productos sean aprobados para la filial de Renault en Colombia. ¿Cuándo? Va a depender del buen timing y de demostrar que somos capaces de ensamblar con altos volúmenes.

¿Sí están dadas las condiciones para que la industria crezca?
Somos muy positivos porque trabajamos con el Índice de Motorización, que en Colombia es de 7 vehículos nuevos por cada 1.000 habitantes. Argentina tiene 20, Chile 19 y Brasil 17. Solo le ganamos a Perú y Venezuela. Tenemos un potencial muy grande, al horizonte de 2018 seremos un mercado de medio millón de unidades al año. Nuestra fábrica tiene una capacidad anual de 80.000 carros, que con inversiones medianas podemos llegar a 100.000 vehículos para atender esa necesidad, pero eso solo se logra en la medida en que el mercado crezca y que seamos capaces de exportar vehículos producidos en Colombia.

¿Qué tareas deben hacerse para aprovechar este potencial ?
Debe haber una política industrial acorde con la situación de un país abierto. Lo primero es activar un programa donde las ensambladoras puedan importar piezas e insumos con cero arancel. El 60% o 65% del costo de un vehículo son las piezas, por lo que en la medida en que se puedan integrar más partes locales se está huyendo de la tasa de cambio y disminuyendo costos logísticos. Lo segunda tarea que estamos hablando con el Gobierno, es un esquema de exportación, no subsidios, sino esquemas autosostenibles que no le demanden gastos al erario público. Lo tercero es la modernización del tejido de proveedores, el acceso de capital para traer nuevas inversiones. Y por último, ver cómo se dinamiza la demanda en el país.

Si no se cumplen estas tareas, ¿qué pasaría con la industria?
Si no se da nada de esto la industria automotriz se va a su mínima expresión, vamos a ver plantas con máximo un turno de trabajo para atender la demanda local de modelos. Fábricas de 80.000 vehículos, como Renault, van a estar en 25.000 vehículos al año. Y eso golpea en la cadena autopartista. Comercialmente no va a tener un impacto dramático porque si no soy capaz de producir locamente lo compro internacionalmente. Si no hacemos algo en el corto o largo plazo la industria de ensamble se va a ver reducida a su mínima expresión.

¿Prevén producir piezas de autos como lo hizo GM Colmotores?
La competencia lo que hizo fue montar una línea de estampado. Nuestro acercamiento a ese esquema es un poco diferente. Lo trabajamos a través de proveedores nacionales y ese esquema es más optimizado. En el mediano plazo no tenemos pensado ese tipo de esquema, seguimos trabajando con proveedores locales e internacionales (Brasil y de Europa). Estamos adelantando un proyecto interesante con proveedores locales. Está en sus inicios.

¿Qué ha pasado con el programa de los carros eléctricos?
En Colombia hay el interés de tener la tecnología. Trajimos el Fluence y el Kangoo, hicimos las pruebas de calidad y técnicas, eso tardó como un año y los carros están 100% aprobados. Luego hicimos el montaje del modelo económico y eso también está listo. Ya hicimos la alianza con Codensa y EPM para la estructura eléctrica y tenemos conexiones domiciliarias y públicas desarrolladas. Además, tenemos dos proyectos pilotos, en Bogotá y Medellín, y la aprobación de las alcaldías de que estos vehículos no tendrán pico y placa. ¿Qué falta? Que el Gobierno apruebe la importación con cero arancel.

¿En qué están ahora?
Tenemos 35 vehículos eléctricos en el puerto, y 12 o 15 vehículos con pedidos finales, pero todavía el Gobierno no ha firmado ese decreto. Si estos vehículos hay que nacionalizarlo con 35% de arancel, esto inviabiliza el producto. Ya tenemos todo, lo que falta es la aprobación del decreto que esperamos se anuncie este mes, pues ya está en el Ministerio de Hacienda.

¿A qué precio llegarán?
En este momento, el modelo eléctrico Kangoo llegaría entre $70 millones o $80 millones. Eso todavía es caro. La idea es que se comercialice con el método del renting o leasing.

Las opiniones

Juan Manuel García
Dir. Ejecutivo del comité automotor de econometría
“La venta de vehículos nuevos este año va a estar cerca de las 290.000 unidades, lo cual es un comportamiento estable frente al año pasado. La economía estuvo muy similar a 2012”.

Juliana Rico
Dir. ejecutiva cámara automotriz de la Andi
“Es notable la caída de la confianza del consumidor colombiano, lo que afecta negativamente la decisión de compra de un vehículo como bien durable en los hogares”.