En 60 días los empresarios se sumaron a la paz

Durante la reunión, que se dio a puerta cerrada, los negociadores de ambos bandos dieron una explicación en detalle de los acuerdos alcanzados hasta el momento en la mesa de negociaciones. Y entre los temas que se debatieron, estuvieron las propuestas de construcción colectiva de posconflicto sostenible e inclusión de los territorios.

David Bojanini García, presidente del Grupo Sura, aseguró que “es necesario recordar que las empresas, y por supuesto los empresarios, somos actores clave en el desarrollo de los territorios, no solo por el papel obvio que nos compete en el sistema económico, sino sobre todo por ser pieza fundamental en el engranaje institucional del país”.

En cuanto a la situación de ahora, el directivo aseguró que “más allá de las complejidades y coyunturas de la negociación, ha sido claro desde el inicio el apoyo que  hemos dado al actual proceso de paz”.

Carlos Raúl Yepes, presidente de Bancolombia, señaló que “desde cada empresa son múltiples las posibilidades de aportar, pero hay que tener una agenda clara, asumirlo con decisión y ejecutarlo”.

 El pasado 27 de octubre, el Consejo Gremial Nacional anunció que como  fundamento de los principios de la organización, “acogen la paz como un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento, tal como lo establece la Constitución.  Entienden la paz no como la ausencia de conflictos sino como el discurrir de una sociedad que cuenta con los mecanismos institucionales para resolverlos”.

El sector empresarial colombiano respalda la negociación y considera que los avances que ha tenido la mesa son valiosos. Sin embargo, hacen un rechazo a los daños a la sociedad, a la economía, a la infraestructura y a los bienes públicos que han dejado las acciones de la guerrilla.  

Los 21 gremios como los grandes empresarios, han expresado su preocupación por la cuantificación de la guerra. No obstante, el fin del conflicto generaría un crecimiento de 2% y 4% en el PIB,  dado que se da un cambio en las prioridades de inversión del Gobierno, y se focaliza en proyectos de salud y educación. Los industriales y otros líderes  consideran que el acuerdo no puede verse solo en cifras de crecimiento, y trabajan  por un trasfondo más social. 

La culminación del conflicto tiene ventajas, por ejemplo, en países como el Salvador y Guatemala, el dividendo de la paz representó un crecimiento de 5% y 4,3% anual en el PIB, respectivamente. 

El próximo 26 de noviembre, en el Hotel Cosmos 100 de Bogotá, se llevará a cabo un foro en el que se revelará el estudio sobre los dividendos que deja la paz a Colombia, a cargo del Departamento Nacional de Planeación.               

Las Opiniones:
Sylvia Escovar
Presidenta de Terpel
“Apoyamos el proceso de paz y estamos trabajando en la reintegración de los excombatientes y vigilamos sus procesos de reinserción ”.