“El gas es el combustible del siglo XXI y tenemos que aprovecharlo”

El año pasado sin duda fue uno de los mejores para el sector gasífero del país, ya que tuvo un crecimiento en las utilidades del 29%. Bajo esta premisa, las empresas productoras, distribuidoras y comercializadoras esperan mantener la tendencia, llegando a más hogares, a más empresas y apostándole a la conversión de vehículos privados y de servicio público.

Para conocer más a fondo sobre los retos de este año en el sector, LR dialogó con Antonio Celia, presidente de Promigas y de la junta directiva de Naturgas.

¿Qué es lo que espera para este 2013?
Para este año, el consumo de gas debe crecer un poco más porque será más seco, lo que quiere decir que las plantas térmicas van a tener mayor despacho. El sector domiciliario debe tener unas 420.000 conversiones en total.

Por otra parte, yo espero que el gas vehicular tenga el impulso que necesita. Insisto en que este servicio es una magnífica opción que debe ser más tenido en cuenta, con algunas medidas simples que se tomen se podría hacer más conversiones. Aspiramos a que los sistemas masivos de transporte usen gas, como se hace en Medellín, pero eso depende de los alcaldes.

¿Por qué es importante apostarle a los vehículos?
El gas natural vehicular representa un menor impacto ambiental, las diferencias son grandes si se compara con los sustitutos, como el diesel.

El gas natural es el combustible del siglo XXI, así lo demuestran todos los estudios. Colombia tiene mucha fortuna de tener gas y hasta ahora lo hemos utilizado bien para beneficio de muchísima gente.

¿Cómo cerró 2012 para el sector del gas?
Fue un buen año. Las utilidades crecieron un 29%, cumplimos el presupuesto estimado, llevamos a cabo todos los planes previstos. En materia residencial no solo cumplimos las metas sino que las superamos, se vincularon 450.000 nuevos usuarios residenciales en el país, mucho más de lo previsto que era de 435.000.

¿Cuáles son las peticiones que ustedes le hacen al Gobierno?
Nosotros somos un sector regulado por la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg). El punto aquí, con todo respeto, es que este sector ha tomado una dinámica muy fuerte, ya no somos lo mismo de hace 20 años afortunadamente. Se debe decir que el 60% de la gente ya usa gas en sus casas, también tenemos 4.500 industrias conectadas, este es el soporte de generación eléctrica. Nos movemos muy rápido, pero la regulación debe moverse al mismo ritmo, no se puede rezagar.

Pero el Gobierno los ha apoyado de buena manera...
Este Gobierno quiere ser el gobierno del gas. Por primera vez el año pasado nos comprometieron a hacer un número determinado de conexiones y lo superamos. Lo que sucede es que la mayoría de las decisiones las toma la Creg, que tiene cierta autonomía, entonces ahí es donde se hace indispensable que tome la pauta y que se tenga clara la política del Gobierno en esa materia.

¿El esquema mixto para la comercialización que propuso el Estado sí es viable?
La subasta no parece ser el mecanismo más idóneo para la comercialización de gas. Lo que los agentes propusieron y que la Creg está de acuerdo es que intentemos los acuerdos bilaterales para que cada quien manifieste sus necesidades y los productores tengan en cuenta eso. Luego de esa ronda sí se podría ver cuál es la subasta, eso permite que la industria tenga mejores opciones y pague los mejores precios.

¿Y cómo ve la eliminación del 8,9% en la contribución de la industria?
Al establecer que toda la industria tenga ese beneficio, la va a beneficiar, entendiendo que esos recursos hacían parte del Fondo de Solidaridad y que el Gobierno sacará esos recursos

¿Ya se superó el tema de confiabilidad, ahora la apuesta es la competitividad?
La confiabilidad es algo que se debe trabajar a diario. Acá lo que hay que tener en cuenta es que el cambio climático hace que se replantee la forma de construir la infraestructura.

En cuanto a la competitividad, tiene que haber un mutuo apoyo entre clientes y comercializadores. Lo que buscamos es tener precios más homogéneos para que no hayan esas diferencias tan grandes que hay, así se tendría contratos más estables.

GNV es la energía más eficiente y económica
En un estudio adelantado por la Universidad de los Andes y el Centro Internacional de Investigación en Sistemas Sustentables se determinó que el gas natural vehicular es una excelente alternativa para los sistemas de transporte masivo del país, debido a que es más económico, eficiente y menos contaminante. El ciclo de pruebas se realizó junto a un operador de Transmilenio, haciendo un comparativo con vehículos diesel, híbridos y eléctrico. En las pruebas, el bus a gas natural superó las condiciones establecidas en el protocolo. La capacidad de pasajeros, rendimiento, autonomía, tiempo de recarga y precio fueron superadas por este bus.