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Aspecto de un tramo de la vía al Llano, que conecta a Bogotá con Villavicencio.
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El laudo entre la concesionaria y la Andi, sucedido por los deslizamientos de 2018 y 2019, fue resuelto el pasado 10 de noviembre
La concesionaria Coviandes, antigua regente sobre la vía al Llano, ganó el litigio contra la Agencia Nacional de Infraestructura, Ani, sobre las responsabilidades por los deslizamientos sucedidos en 2018 y 2019 y la avería del túnel 13 y el Puente 1 en la concesión Bogotá-Villavicencio.
El Tribunal dictaminó que la concesionaria Coviandes cumplió con la obligación de diseñar y construir la infraestructura correspondiente, y la inestabilidad y derrumbe de la ladera del kilómetro 58 en las condiciones en las que ocurrió fue "causada por circunstancias o situaciones hidráulicas, geológicas, geotécnicas y sísmicas, y la causa principal o preponderante fue la hidráulica".
Además, "las causas de la inestabilidad de la ladera del KM 58 fueron imprevistas e imprevisibles durante la etapa de elaboración de los diseños del proyecto y de la etapa de la construcción del túnel 13".
Por lo tanto, el Tribunal dictaminó que "la inestabilidad y el derrumbe de la ladera del KM 58 y sus consecuencias no son imputables" a la concesionaria.
"El Tribunal desestimó las pretensiones de la ANI de que se declarara la responsabilidad de Coviandes", sentenció el ente.
Ahora bien, el Tribunal determinó que las obras no pueden ser revertidas en su estado actual a la ANI, ya que no cumplen con el propósito del contrato de concesión. No obstante, mencionó que las reparaciones necesarias en el túnel 13 y el puente 1 no son responsabilidad de Coviandes. "Cualquier obra de reparación o reconstrucción realizada por el concesionario debe ser remunerada tras un acuerdo previo con la ANI", dice la sentencia.
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