Tras caducidad del contrato, el túnel de La Línea requerirá más tiempo y plata

Como consecuencia de la declaración ayer por parte del Instituto Nacional de Vías (Invías) de la caducidad del contrato, ahora el túnel de La Línea se demorará más tiempo en estar listo y le costará más dinero a los contribuyentes. Sin embargo, estas noticias parecieran no ser nuevas cuando se habla de la ejecución de los proyectos de infraestructura en Colombia.

Este proyecto conecta los departamentos de Tolima y Quindío, cruzando por el Alto de La Línea, en la cordillera central, en donde se construye un corredor de 8,65 kilómetros desde Cajamarca hacia Calarcá y una segunda calzada cercana al municipio de Calarcá.

La licitación de estas obras tardará en contratarse no menos de cuatro meses y el proyecto podrían costar mínimo $160.000 millones más, a los $629.000 millones por los que fue contratado, según varios expertos consultados por LR.

La ministra de Transporte, Natalia Abello concuerda con los expertos, puesto que para ella, la ejecución del megaproyecto que intenta unir al país con el Puerto de Buenaventura solo podrá estar lista en 2017, aún cuando se debió entregar como último plazo el 30 de noviembre del año pasado.

La audiencia en contra del contratista la Unión Temporal Segundo Centenario (Utsc) se constituía como la reunión número once entre el contratante y Utsc, para definir cuál sería el futuro del proyecto después de que supuestamente se hubieran incumplido los plazos de entrega del proyecto, se hubiera incumplido el cupo de crédito y tuviera problemas de carácter ambiental.

No obstante, el contratista Carlos Collins defendió siempre que las obras tenían un avance del 99,4% y que solo le faltaría un mes para terminar con la construcción, por lo que era menos complicado que le dejaran terminar el contrato. “Ya el túnel está en un 99,2%, entonces me están caducando por un 0,8% de ejecución. El Gobierno tendrá que volver a licitar y le tomará más tiempo culminar las obras”, dijo Collins.

El contratista tiene la alternativa de interponer un recurso de reposición puesto que la caducidad no tiene solo las consecuencias ya mencionadas sino que también inhabilita a las partes a contratar con el Estado en los próximos cinco años, proceso que retrasará la obra más tiempo.

“Con el recurso y las demás acciones judiciales retrasarán el proceso perfectamente seis meses a un año, todo depende de las acusaciones del Invías en resolver los recursos”, explicó Iván Darío Botero, experto en contratación estatal de la Escuela Superior de Administración Pública (Esap).

Por su parte, Francisco Suárez, consultor de infraestructura, asegura que “como ya se conocen los riesgos geológicos de la obra y falta poco para la culminación, una nueva licitación no debería resultar tan traumática ”. Sin embargo, el experto admite que se requerirá más tiempo y dinero.

Si se comprobará que las obras están en un 74% de ejecución, tal como lo dice el Invías, al contrato se le deberá adicionar no menos del 26% de los recursos iniciales para concluir la obra, lo que equivale a cerca de $160.000 millones.

Collins atribuye la decisión a intereses de Vargas Lleras

El ingeniero Carlos Collins, representante legal de la Unión Temporal Segundo Centenario, sugirió que la decisión de la caducidad del contrato del túnel de La Línea se debía a intereses del vicepresidente, Germán Vargas Lleras. “Entre mis enemigos está un Gobernador de Cambio Radical, el zar de las concesiones de 4G y el Vicepresidente”, dijo. El contratista insistió que las obras se pudieron haber terminado en menos de 30 días, pues solo faltaría un 0,8% de la ejecución total del contrato.

Las opiniones

Natalia Abello
Ministra de Transporte
“No hay luz al final de las obras de este túnel (...) el avance ha sido de 1% en los últimos tres meses, con ese ritmo ni en seis años terminamos”.

Carlos Collins
Representante legal de la Utsc
“No me preocupa lo mío sino lo que le viene a Colombia. Si este es el estilo de Gobierno que vamos a tener, tengámonos de atrás”.

Patricia Mier Barros
Especialista en Derecho Administrativo
“Nos encontramos con un funcionario del Invías que habla y habla, pero que carece de competencia para tomar la decisión”.