Santos busca apoyo al posconflicto en EE.UU.

El presidente se reunirá hoy con su homólogo de EE.UU., Barack Obama para hablar del proceso de paz en Cuba.

La visita del presidente, Juan Manuel Santos, a Estados Unidos tiene dos objetivos concretos: conseguir apoyo internacional al proceso de paz por medio de ayuda monetaria al posconflicto y, como cualquier otra visita oficial al extranjero, mejorar las relaciones con los aliados.

"Voy a proponer a los Estados Unidos y al presidente Barack Obama que así como hace 50 años el presidente John F. Kennedy fue a Colombia a proponer la Alianza para el Progreso, ahora que estamos medio siglo más adelante, hemos progresado, pero podemos revivir una alianza de este tipo, una alianza para el progreso y por la paz", manifestó el primer mandatario a su llegada a Miami.

Según la Casa de Nariño, hay una agenda bilateral amplia que se desarrollará en tres días, que es lo que durará la visita. Y, a diferencia de lo que han sido los encuentros de los mandatarios colombianos con sus homólogos estadounidenses, esta vez no se centrará la conversación únicamente en temas de seguridad y narcotráfico, sino que abarcará educación, tecnología, energía y biodiversidad, que son componentes del programa de ayuda americana que intentará vender Santos en la Casa Blanca hoy.

El eje de esta corta gira con el aliado del norte es la paz, de ahí que dentro de itinerario de ayer estuviera la visita a la Universidad de Miami en donde Santos recibió la Medalla Presidencial de la institución como acto recíproco por haberle concedido a Donna E. Shalala, presidenta del claustro, la medalla al mérito del Congreso de Colombia en 2011; y de paso dio una conferencia sobre el desarrollo de las negociaciones con las Farc y de las implicaciones del Plan Colombia para la lucha contra el narcotráfico en el país.

Llamó la atención el tono que utilizó el presidente en la Universidad, que corresponde con la nueva estrategia del Gobierno Nacional para mostrar el conflicto: paz, pero sin tregua armada.

Se trata de un planteamiento que el presidente ha venido usando últimamente para justificar la falta de un cese de hostilidades entre las partes que están en La Habana discutiendo el proceso paz, pues "si por alguna razón las negociaciones fracasan, no quiero pasar a la historia como el presidente que le dio ventaja militar a las Farc", explicó el mandatario, citado por Colprensa.

Diplomacia y dinero

La visita oficial del presidente a Estados Unidos se enmarca "en la aplicación de una estrategia internacional por mostrar al país, para mostrar liderazgo. Pero, a su vez, Colombia también sabe que necesita socios para el posconflicto, para que se aplique una clase de plan Marshall para el país, en el que la comunidad internacional participe activamente, sobre todo, en su financiación", señaló el internacionalista de la Universidad del Rosario, Mauricio Jaramillo Jassir.

"Y Estados Unidos es uno de los que desde hace muchos años se ha mostrado más a favor de este tipo de salidas, no fue gratuito, por ejemplo, el apoyo de los americanos al Plan Colombia. Entonces no sorprende la intención y definitivamente no es una visita exclusivamente demagógica".

En últimas, es una reunión diferente, o "sui generis", como indicó Santos, pues podría, como en su tiempo lo logró el presidente Andrés Pastrana, garantizar un giro de recursos para que Colombia pueda aplicar programas de posconflicto en caso de que sea exitosa la negociación. Faltará ver si la chequera de la Casa Blanca está tan abierta como en 1999.

Embajador antes de tiempo

El nuevo embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Carlos Villegas, presentará sus credenciales antes del encuentro entre los dos mandatarios, quiénes estarían presentes en dicho evento que lo oficializa como embajador en Washington. Se trata de la primera vez que un embajador entrega cartas credenciales ante el presidente Obama en compañía del jefe de Estado. Lo anterior, le permitirá a Villegas ganar seis meses de trámites, pues se acostumbra esperar a que se reúna un grupo de diez embajadores para presentar sus cartas ante el primer mandatario estadounidense.