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Las protestas han paralizado la vía a la altura de Risaralda: Chocó es el punto de partida de a carretera clave para el comercio
Desde hace cinco días, en la mañana del pasado viernes 8 de julio, inició un paro indefinido de 1.000 habitantes indígenas, agros y mestizos, oriundos del corregimiento de Santa Cecilia en Pueblo Rico, Risaralda. La población reclama al Gobierno Nacional varios problemas como falta de oportunidades, laborales y educativas, además de fallas en infraestructura para conectar a las comunidades.
Como forma de protesta, las comunidades están llevando a cabo un plantón que tiene cerrada la vía Panamericana, la cual conecta a Risaralda y Chocó y cuyo cierre genera una parálisis del comercio al interior de Colombia. Según el Instituto Nacional de Vías (Invías), la vía Panamericana es la principal ruta terrestre de comercio con Ecuador y una conexión vial clave al sur de Colombia.
De norte a sur, la carretera Panamericana conecta los departamentos de Chocó y Nariño: las protestas han paralizado el comercio, tráfico de turistas y camiones de carga, entre el Chocó y Risaralda.
Los manifestantes están esperando que haya una respuesta por parte del Gobierno ante hechos como la falta de personal en el hospital San Rafael, en el corregimiento de anta Cecilia.
“No tanto por los insumos, sino la calidez humana con la que atiende el personal médico. La gerente nunca se sentó a dialogar con nosotros, la atención es pésima, han fallecido aproximadamente tres o cuatro menores indígenas por mala atención, un menor mestizo y también un menor afro”, dijo Víctor Moreno, representante del Consejo Comunitario Afro de Pueblo Rico.
Desde el ministerio señalaron que de esta manera se pueden fortalecer los procesos para la formalización de la pequeña minera
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