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La Empresa de Energía de Bogotá (EEB) no completaba ni un día celebrando la compra de 31,92% de la Transportadora de Gas Internacional (TGI), cuando su nueva filial sufrió su primer atentado terrorista en lo que va del año. Como resultado, cuatro municipios de la Guajira se quedaron sin el servicio de gas natural, pues la empresa tuvo que cerrar las válvulas.
El ataque se realizó el pasado martes a las 11:15 p.m., en el gasoducto Ballena- Barrancabermeja, en inmediaciones de Papayal, corregimiento de Barrancas. Papayal, Barrancas, Hato Nuevo y Fonseca, fueron los cuatro municipios que se resultaron afectados.
Ricardo Roa, presidente de la Transportadora, contó que ya ingresaron las maquinas y los técnicos necesarios para reparar el daño. “Estamos trabajando de forma coordinada con las autoridades locales para activar el plan de contingencia y mejorar la seguridad”, explicó.
La compañía calcula que los arreglos estarán listos entre hoy y mañana, para devolverles el servicio a los municipios en La Guajira.
Este sería el tercer atentado terrorista que sufre la compañía en dos años, pues TGI registró dos ataques en 2013: “uno fue en febrero, con características similares a este, pero el acceso a la zona era más complicada. El otro fue a mediados del año, pero se evitaron daños”, agregó Roa.
Aún no hay cálculos de los costos para las reparaciones, pero el directivo destacó que el principal daño es para las comunidades, que no tendrán el servicio.
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