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US$5.400 millones es la deuda con el fondo monetario que tiene el Gobierno, que planea refinanciar a largo plazo.
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Analistas financieros expusieron sus preocupaciones por propuesta del gobierno para renegociar deuda con el FMI a largo plazo
Desde que el presidente Gustavo Petro anunció que solicitará una refinanciación de la deuda externa con el Fondo Monetario Internacional, FMI, los analistas señalaron que podría generar nuevas condiciones en el crédito actual y una lupa sobre la deuda.
De acuerdo con el mandatario, el crédito flexible con el FMI estaría apretando el bolsillo público, por lo que haría una renegociación para pagar la deuda a largo plazo. “De tal manera que pueda abrirse un espacio de financiación mayor al que tenemos para el gasto social”, dijo Petro.
El desembolso, realizado el 2 de diciembre de 2020, por cerca de US$5.400 millones, se usó para equilibrar las finanzas y ayudar durante la pandemia de covid-19. Además, este pago también sirvió como una reserva de dinero para proteger al país contra posibles problemas financieros internacionales.
Este préstamo, a plazo de tres años y 1% de tasa de interés anual, dejó un cupo de US$12.200 millones de los US$17.600 millones disponibles.
José Manuel Restrepo, exministro de Hacienda y rector de la Universidad EIA, señaló que el crédito presenta condiciones favorables, que favoreció cubrir las necesidades de la pandemia para inversión social.
“Hay argumentos de sobra para demostrar que se emitió deuda de manera prudente, a largo plazo y con gestión proactiva de refinanciamiento”, dijo Restrepo.
De acuerdo con José Antonio Ocampo, exministro de Hacienda, la línea de crédito actual es un privilegio, y renegociarla a largo plazo llevaría a nuevas condiciones, aumentaría el costo y traería una revisión macroeconómica.
A lo primero que echarían lupa, según Juan Camilo Restrepo, exministro de Hacienda, sería la deuda externa, que en 2023 sumó US$196.360 millones, que representa 53,7% del PIB, 1,13 puntos porcentuales más alta que en 2022, cuando representó 53,1%. Lo cual sería un “pésimo argumento” a presentar.
Según cifras del Banco Mundial, la deuda externa desde 2010 a 2023 aumentó más de 30,4 puntos porcentuales. La mayoría de la deuda, 83%, se debe pagar en más de un año. El resto, 17%, se debe pagar en un año o menos. En cuanto a quién debe el dinero, 58% de la deuda es del sector público y 42% es del sector privado. Además, 16% de toda la deuda son préstamos entre empresas que tienen una inversión directa entre ellas.
Por tal motivo, Ocampo sugirió pagar la deuda y renegociar después, y Restrepo, evitar plantear los asuntos en público, y preferir hablar discretamente con el FMI, para evitar “trasmitir a la comunidad financiera internacional la sensación de que Colombia está al borde de un default en el servicio de su deuda”, alertó el exministro. “Cosa que, por supuesto, no es cierta”, agregó.
“El FMI no renegociará el cronograma de pagos de un programa ya acordado sin exigir nada a cambio. Además, sería un craso error cambiarla por una línea de largo plazo”.
“No es apropiado plantear estos asuntos a los cuatro vientos al calor de una manifestación pública sin primero haber hablado discretamente con el acreedor”.
Según el Banco Mundial, Colombia tiene la cuarta deuda más alta en la región. Los tres países con más deuda son México (US$600.423 millones), Brasil (US$578.599 millones) y Argentina (US$247.000 millones). Aunque Nicaragua, El Salvador y Paraguay tienen deudas que superan 60% de su PIB.
Por fuera, China y Rusia tienen deudas que representan menos de 18% de su PIB. Sin embargo, la deuda de India representa 43,16% de su PIB.
Según José Manuel Restrepo, la deuda pública es responsabilidad de quien gobierna, y se defendió del ataque a la gestión del Gobierno Duque. “Tristemente, usted rompe la tendencia. Se vuelve el papá del gasto primario (gasto sin incluir Intereses) o derroche, pues este gasto crece en 2023 y 2024”, dijo.
Restrepo sugirió recuperar el crecimiento y enfocarse en evitar la recesión de la inversión privada. “Así habrá más recaudo, menos déficit y menos deuda”.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, sería el encargado del Gobierno de llevar la solicitud a Kristalina Georgieva, directora del Fondo, hasta su oficina en Washington, y junto con el resto de ministros de Hacienda.
“Si tenemos que pagar, hoy no hay recursos de la Nación. Todo lo que paguemos en deuda reduce las posibilidades de inversión. El debate es: pagamos deuda o invertimos en el país”, respondió Bonilla,
También agregó que la deuda no reactiva, en cambio, la inversión sí, y que el pago de la deuda dejaría bien al país en buenos términos, “pero puede descuidar la inversión”.
Así, el Gobierno propondrá a la directora un apoyo para mejorar el perfil de deuda del país, de cara a la crisis del sistema de salud y la política del Congreso.
Para el MinHacienda, este sería el plan indicado para solucionar la crisis. Por ahora, Colombia comenzó a saldar su obligación con un primer pago de US$632 millones de este año. Sin embargo, aún quedan 7 pagos pendientes, cada uno de alrededor de US$650 millones, que se realizarán entre este año y el próximo, lo que elevó el pago de la deuda pública.
De acuerdo con Restrepo, el FMI ha destacado a Colombia en la Línea de Crédito Flexible por los pagos graduales que ha realizado, por lo que confrontó al Presidente para ajustar el gasto público.
“Una de las fuentes que se utilizó en Colombia y a la que acudieron más de 90 naciones del mundo para financiar las necesidades extraordinarias de la pandemia fue la línea flexible de crédito del FMI”, dijo Restrepo, y describió que era una “deuda” emitida de manera "prudente, a largo plazo".
En 2022, el directorio ejecutivo del FMI le aprobó al Gobierno un acuerdo por US$9.800 millones a dos años, dado el cumplimiento con los criterios de acceso, y bajo los mismos motivos de liquidez y reserva ante los riesgos externos.
“Las autoridades están firmemente comprometidas a mantener políticas macroeconómicas muy sólidas. Existe igualmente un amplio consenso sobre la necesidad de preservar la gran solidez de los marcos de política económica”, explicó el Fondo. Además, aplaudió que Colombia realizó los pagos graduales, lo que genera confianza.
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