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El director del Adam Smith Center for Economic Freedom dijo que por la tensión con EE.UU. no sería positivo negociar con China
En medio de las tensiones derivadas por las medidas arancelarias adoptadas por el presidente de EE.UU., Donald Trump, Colombia evalúa estrategias para mitigar las consecuencias, o en el mejor de los casos no tener que ser objeto de estos impuestos.
No obstante, hay lecturas que definen este momento como una oportunidad para ciertos sectores, mientras que otras sugieren que las decisiones del gobierno estadounidense no solo son una herramienta comercial, sino que también son políticas.
Carlos Díaz-Rosillo, director fundador del Adam Smith Center for Economic Freedom de FIU, Ph.D. y exdirector de políticas públicas de la Casa Blanca, dijo que Colombia debería tomar una postura más abierta al diálogo y a mostrar resultados, para que EE.UU. vuelva a tener credibilidad en su política y su economía, lo que restablecería el flujo de recursos y otras ayudas.
Además, señaló que no es buena idea una confrontación entre el presidente Gustavo Petro y Trump, ni buscar aliarse con China.
Creo que tiene que actuar con mucha, mucha prudencia. Si bien Colombia es un socio estratégico para Estados Unidos, lo ha sido por décadas y espero que lo siga siendo, no se puede negar que EE.UU es más importante para Colombia.
Hay que poner esto en perspectiva y saber entender que hay que actuar con mucha prudencia. Aquí no es un tema de ideología, porque el presidente Trump puede negociar con líderes de izquierda o de derecha.
Si se compara, por ejemplo, la manera en que el presidente de Colombia ha reaccionado a las acciones del presidente Trump y la manera en que la presidente de México lo ha hecho, ves una diferencia enorme.
“Es fundamental un trabajo conjunto gobierno y sector privado para excluir a Colombia de la medida arancelaria utilizando los canales que ofrece el TLC”.
Entonces, una reacción confrontacional no es productiva y una ruptura económica entre Colombia y Estados Unidos, eso sí, afecta a EE.UU. pero afecta mucho más a Colombia. Entonces, por eso hay que actuar con mucha prudencia y buscar la manera de llegar a un acuerdo.
Ese acuerdo tiene que tener mucho más que el tema solamente de comercio. Ahí el presidente Trump va a querer ver que Colombia esté avanzando en temas la erradicación de drogas.
El trabajo del presidente de Estados Unidos es abogar por los intereses de los americanos, no de los colombianos, ni de los europeos, ni de otras personas. Entonces, la labor de defender a los colombianos le corresponde al presidente de Colombia.
Hay que entender esos aranceles como una herramienta para que Trump pueda avanzar en sus intereses. Yo creo que para entender los aranceles, y para poder entender el por qué el presidente Trump ha decidido imponer esos aranceles, hay que entender que no podemos ver a los aranceles solamente como una herramienta meramente económica, también son una herramienta política.
Hay cinco razones por las que el presidente Trump considera que su política arancelaria es la adecuada. Número uno por equidad, y reciprocidad. Para él, parece muy injusto que ciertos países le pongan aranceles a Estados Unidos y EE.UU. no responda y los acepte.
Segundo es un tema de seguridad nacional. Desde antes de la pandemia nos dimos cuenta que la cadena de suministro en Estados Unidos no puede depender de países extranjeros. Mucho menos de países que son claramente adversarios a Estados Unidos, como China. Y la realidad es que hoy día gran parte de la cadena de suministro en Estados Unidos depende de China y de otros países.
Tercera, para él es muy importante que regrese a Estados Unidos la base industrial del país. No solamente por temas de seguridad nacional, sino también por un tema político y hasta cultural.
Por décadas, a raíz de los diferentes tratados de libre comercio, muchos trabajos, sobre todo trabajos industriales que eran parte de la esencia del norteamericano, se fueron a otros países, a raíz de los TLC y la globalización.
Número cuatro, un tema muy práctico, con el recaudo de esos aranceles, le va a permitir a Trump decir que gracias a su política pública, gobierno norteamericano recaudó billones de dólares, dinero que puede utilizar para muchas cosas como pagar la deuda, u otras prioridades que tenga el presidente.
Quinto, también son una herramienta de negociación que le va a permitir conseguir concesiones de otros países.
Lo peor que puede hacer no solamente el gobierno colombiano, sino el gobierno de cualquier parte del mundo en su negociación con Estados Unidos, es acercarse a China.
Ahorita los chinos están agresivamente mandando un mensaje a todo el mundo, algo como, lo que Estados Unidos no te compra te lo compramos nosotros. Están agresivamente tratando de captar la posible pérdida de un mercado americano y lo peor que pueda hacer un gobierno sea el de Colombia o sea de cualquier parte del mundo es dejarse llevar por los cuentos chinos.
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