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Así se ha visto impactada la inflación por el salario
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El Gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, aseguró que este es uno de los factores por los que la caída de la inflación ha frenado su senda reduccionista
En el tercer año de Gustavo Petro en el poder se registró el aumento de salario mínimo, en términos reales, más alto desde que comenzó su gestión. Aunque el incremento fue de 9,53%, si se le resta el dato de inflación de 2024 (5,20%), da como resultado un ajuste real de 4,4%.
De acuerdo con los analistas, el ajuste salarial ha sido un factor que influye en el control del Índice de Precios al Consumidor. El gerente general del Banco de La República, Leonardo Villar, aseguró que este hecho ha incidido en que la inflación se haya acelerado más de lo que ha bajado en lo que va de año.
Villar dijo que los costos laborales este año se han subido casi 10%, lo que impacta de manera significativa en las empresas y la economía en general. Agregó que esto trajo consigo un ajuste mucho más fuerte en los subsidios de transporte, lo que más incidió en el recargo de los empleadores.
“Encontramos que el costo de contratar a una persona, por el mínimo, aumentó 11%, cuando la meta de inflación era 3%. Eso es muy significativo”, dijo Villar.
No obstante, otros analistas aseguran que el costo de contratar a una persona, si bien es un poco mayor al salario mínimo, no aumenta tanto, y viene estando casi a la par de lo que se incrementa en términos reales.
“Alzas en el salario mínimo tienden a impactar con mayor fuerza a los servicios intensivos en mano de obra, ya que una parte relevante de sus costos está asociada a estos salarios”.
“El aumento en el salario mínimo puede afectar los precios mediante distintos canales, primero para anotar el canal directo de los costos laborales, es decir, el encarecimiento de la mano de obra”.
Según Villar, esta es una de las razones por las que la inflación se ha tardado tanto en acercarse a la meta puesta por el Emisor que es de 3%, un objetivo que el Gobierno Petro pensaba cumplir al cierre del año pasado, pero que no ocurrió, y por el comportamiento que ha tenido el IPC en los primeros siete meses de 2025 tampoco se logrará, de hecho pronostican que dicho objetivo se cumpliría hacia 2027.
Por su parte, el gerente de inversión y estrategia de Alianza Valores y Fiduciaria, Felipe Campos, ratificó que el ajuste salarial está incidiendo en el cumplimiento de la meta del IPC. Aseguró que al cierre de este año el dato se ubicará en 4,8% y no de 3,8% como se pronosticaba en meses anteriores.
Aunque si bien todas las ramas económicas se ven impactadas, porque la gran mayoría de empleados se ganan un salario mínimo, hay sectores que resienten estos incrementos “con mucha más fuerza”.
Andrés Langebaek, director de estudios económicos de Visión Davivienda, señaló que los más impactados son aquellos rubros que ofrecen los servicios intensivos en mano de obra, ya que una parte relevante de sus costos está asociada al monto de estos salarios.
Añadió que los sectores más sensibles a estos aumentos salariales son los servicios domésticos, o de comidas fuera del hogar, mantenimiento y reparación de vehículos y algunos de los servicios médicos.
Laura Clavijo, directora de investigaciones económicas, sectoriales y de mercado de Bancolombia, coincidió que cuando hay un aumento en el sueldo mínimo por su puesto, se suben los costos laborales, porque la mano de obra se encarece.
Aseguró que esto, lo terminan resintiendo todos los ciudadanos porque debe sumarse a los costos de producción y por ende se deriva en el aumento de precios de venta, es por ello, que, en Colombia, los primeros dos meses del año se ve aumento en la mayoría de los comercios o servicios.
Clavijo explicó que hay otro canal que se ve afectado por este incremento que define el Gobierno como el de la demanda agregada. “Al haber un aumento en el salario mínimo, en general esto se traduce, en mayores ingresos de los trabajadores y con ello podrían presionar al alza, vía mayor demanda de los bienes, sobre todo de consumo masivo”.
Este conjunto de canales deriva en el tercer factor que es el de la expectativa de la inflación. Clavijo afirmó que hay varios rubros dentro de la canasta básica que tienden a estar indexados al salario mínimo directamente, bien sea vía regulación u otros porque es la costumbre hacerlo, entre los ejemplos, está el caso de los cánones de arrendamiento.
“Si las expectativas de un mayor salario mínimo prevalecen, no hay mayores incentivos para los agentes del mercado de reducir los precios y más bien van incorporando ese mayor aumento”, explicó.
De acuerdo a un estudio del Banco de la República, un incremento de 100 puntos básicos del salario mínimo nominal puede generar un alza de la inflación total entre 9,5 puntos básicos y hasta 14 puntos básicos.
“Realmente no es despreciable este efecto. Durante 2023 y 2024 el salario mínimo ha aumentado 3,6% en términos reales y pues de alguna manera eso es casi que duplicando el aumento que se ha tenido en años anteriores. Entonces sin duda, pues son unos ajustes importantes”, declaró Clavijo.
Por ejemplo, apenas se conoció el primer dato de inflación del cierre de 2024, Corficolombiana analizó las divisiones de gastos que tuvieron un mayor repunte como consecuencia del ajuste salarial. Al igual que Visión Davivienda determinaron que las comidas rápidas y los servicios domésticos, así como otros servicios como por ejemplo de las peluquerías tuvieron mayor aumento en sus costos.
Tal como lo explicó Clavijo, la división de arriendos también se vio impulsada porque este aumento se ve dependiendo de la fecha que tenga el contrato que se tenga el arrendatario con el inquilino.
Aunque el dato se conocerá a final de año, en los próximos meses comienza a discutirse el monto de salario que entrará en vigencia desde el 1° de enero de 2026, y Petro ya comenzó a dar luces de cómo quedaría.
El incremento estaría por encima de la inflación, y dijo que eso es lo que dinamiza el consumo. “Subí el salario mínimo como ninguno, aún me queda un año, voy a aprovechar”, dijo.
El gerente del Emisor, señaló en varias oportunidades que desde la Junta Directiva han mantenido una postura cautelosa, pues la reducción de la inflación en estos siete meses solo los ha convencido para reducir las tasa de interés solo en una oportunidad.
Reiteró que la cautela que han mantenido se debe al incremento en el mínimo, por ello, surge la interrogante, en caso que el año que viene el ajuste sea similar al de este año, lo que mantendría el congelamiento de los tipos por parte de los codirectores.
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