“Andi, sindicato patronal que defiende intereses de pequeños grupos”

Como un “grave drama” calificó Gabriel Poveda Ramos, miembro de la Academia de Ciencias Económicas, la situación actual de la Asociación de Empresarios (Andi), entidad donde trabajó por 15 años y que a su parecer “no tiene interés alguno en trabajar por la industrialización”.

El experto señaló ayer durante un homenaje organizado por la Universidad del Rosario que la industria se está muriendo y que el Gobierno ha sido “incompetente” en manejarlo, especialmente si se comparan las proyecciones de crecimiento de 3% para este año frente a las reportadas en 1960, que superaban 6%.

En entrevista con LR, este ingeniero eléctrico y químico de la Universidad Pontificia Bolivariana calificó como “vergonzosos” los pronósticos actuales.

¿La Andi de hoy impulsa el crecimiento de la industria?
La Andi donde yo trabajé luchó por una industrialización, pero la de hoy es un sindicato patronal que defiende intereses rapaces de pequeños grupos conformados por mezcla heterogénea, ya no de empresas, como era antes, sino de empresarios que defienden sus propios intereses monetarios. Es lamentable como terminan haciendo del gremio uno monopolístico.

¿Cuándo fue ese cambio?
Desde la década de los 90 cuando el presidente César Gaviria decidió destruir la industria.

¿Qué le haría falta a la Andi para volver a ser lo que era?
La Andi ya no tiene remedio.

¿Propone que la eliminen?
Yo no soy nadie para decir que se elimine, pero lo que sí se es que Colombia hoy no tiene nada importante que esperar de la Andi.

Pero el país necesita un gremio de empresas…
Claramente. La industrialización debe ser una causa nacional, como lo es la educación o el desarrollo agrícola. La Andi defendió esa idea desde que se fundó hasta 1990, pero la institución que hoy subsiste no trabaja por dicha causa, sino por los intereses de algunos industriales.

¿Habría entonces desindustrialización?
Hay. En 1990 cuando el expresidente Gaviria en mala hora subió a la Presidencia, decretó su sentencia. La industria como sector generaba 22% del PIB, hoy en día está aportando 11%. En términos relativos, dentro del total de la economía, la industria hoy es la mitad de lo que era antes.

¿Cree que el Pipe ha ayudado de alguna manera?
Ni a crear ni a mejorar. Son paños de agua tibia para un cáncer.

¿Qué hace falta entonces?
Un Gobierno que crea en el desarrollo industrial, porque el actual no lo hace, al contrario, quiere privilegiar a las empresas extranjeras desde la explotación inmisericorde de los recursos.

¿Cuáles son los problemas estructurales del sector?
El primero y el más grave es el neoliberalismo, porque no le importa nada que Colombia se industrialice y eso permea toda la política del Gobierno. El segundo es la política cambiaria, expresada por una variación de flujos errática que favorece la importación y desestimula la exportación, de manera que ataca directamente al productor facilitando la competencia de los extranjeros. El tercero es el desconocimiento que tiene el Gobierno de los factores propulsores que podrían reimpulsar el desarrollo industrial, los hay pero están dormidos.

¿En qué sectores habría oportunidad?
Tenemos riquezas maravillosas en bosques, minerales industrializables, metales exportables, maquinaria, textiles y carboquímica, donde Colombia debería ser hoy el mayor productor de gasolina a partir de carbón. En muchas formas tenemos lo que se llama ventaja comparativa.

¿Políticas de qué tipo?
Querer la industrialización, tener una política cambiaria y otras que se refieran a la redistribución de la riqueza, porque en un país con una concentración de pobreza tan grave como la que tiene Colombia es muy difícil formar un mercado interno suficientemente desarrollado que sea propulsor de la industrialización.

¿Le suena la creación de un ministerio para la industria?
Sí, es una de las primeras medidas para recuperar el camino. Pero la entidad no debe ser burocrática sino muy proactiva.

La opinión

José Guillermo García
Decano de economía de la Universidad Nacional
“En el contexto internacional, Colombia es una economía con regular desempeño por su debilidad en el desarrollo de esta actividad productiva que genera valor agregado”.