Un árbol de navidad natural para decorar su casa le puede costar hasta $4,9 millones

Se acerca una de las temporadas más importantes y felices del año-para muchos-, la Navidad; una época en la cual las luces empiezan a brillar en las calles, los villancicos y música navideña suenan en cada esquina, cada lugar se llena de adornos rojos, y entre ellos, uno de los elementos más emblemáticos que marca oficialmente el inicio de la temporada: el árbol.

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Para muchos de los hogares colombianos, armar el árbol sigue siendo una tradición sagrada, sin embargo, en los últimos años, las tendencias han ido cambiando, ya que, ha crecido el interés por volver a lo natural, por ello, los árboles de Navidad artificiales han perdido popularidad para dar paso así a aquellos que huelen a bosque.

Comprar un árbol natural es para muchas personas una forma de reconectarse con la esencia de las festividades; pese a que los árboles artificiales dominan el mercado por su durabilidad, los naturales tienen un encanto que los hace únicos.

Con la llegada de la temporada de Navidad se ha preguntado, ¿cuánto cuesta un árbol de natural?

Los precios varían según la altura y el tipo de árbol que se requiera, sin embargo, algunos datos muestran una amplia gama de valores lo cual permite a cada familia acomodarse para encontrar uno acorde con su espacio y su bolsillo.

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Dentro de los más costosos se encuentra el de 400 centímetros, el cual tiene un valor de $4,9 millones, y pueden ser utilizados bien sea para centros comerciales, porterías y espacios grandes que permiten ubicar uno de este tamaño.

Sin embargo, para las familias que buscan un árbol que se acomode a la altura, los precios pueden variar entre $738.000 y $184.000, siendo el primero uno de los más altos con 220 centímetros y el más económico con 130 centímetros, de los más bajos de todo el mercado.

Dentro de otros precios y alturas se encuentra el de 300 centímetros, el cual tiene un valor de $2,2 millones; 240 centímetros el cual equivale a $1,6 millones; el árbol de 210 centímetros que cuesta alrededor de $629.000; y, entre los más económicos con un valor de $242.910 y una altura de 150 centímetros, entre otros más.

Este aumento de los precios reflejan además del tamaño, el trabajo también detrás de cada uno, ya que, para esto se necesita años de cultivo, cuidados permanentes, control de plagas y un proceso de transporte que asegura que el árbol llegue fresco y frondoso al hogar; en el país, muchos de estos se encuentran en viveros especializados ubicados en regiones frías como Cundinamarca, Boyacá o Nariño, donde el clima favorece el crecimiento del pino y el ciprés.

Ante esto, José Joaquín Madero, senior manager Marketplace Mercado Libre Colombia, afirmó que para este año las búsquedas de árboles de Navidad alcanzaron 4.300 registros entre el 1 de septiembre y el 29 de octubre de este año. “Septiembre aportó aproximadamente 1.400 búsquedas, mientras que octubre sumó 2.900, lo que representa un crecimiento del 100% respecto al mes anterior. Este aumento estuvo impulsado por picos a finales de octubre, donde el volumen diario llegó a ser entre tres y cinco veces superior al promedio del mes”, afirmó.

¿Por qué el auge del natural?

Más allá de lo estético, los árboles naturales ofrecen diferentes experiencia que lo hacen diferente al artificial, desde su olor hasta las texturas de las ramas; además, muchos de estos se cultivan de forma sostenible y no provienen de bosques talados indiscriminadamente, si no vienen de plantaciones específicamente diseñadas para su venta en esta temporada.

Por esta razón, cada árbol cortado da paso a uno nuevo, y, en muchos de los casos, las fincas que cultivan estos árboles reforestan el doble o hasta el triple de lo que venden, lo cual ayuda a mantener el equilibrio ambiental.

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Dentro de las principales discusiones que tiene comprar un árbol natural es el impacto ambiental, pues, a simple vista podría parecer que cortar un árbol es perjudicial, sin embargo, un árbol natural, si proviene de un cultivo controlado, podría tener una huella de carbono menor que un árbol hecho de manera artificial.

Estos suelen estar hechos de PVC, es decir, cloruro de polivinilo, el cual es un derivado del petróleo, y su generación puede generar gases contaminantes; además, la mayoría de estos no son producidos acá lo cual hace que se debe transportar por miles de kilómetros, incrementando así su impacto ambiental en el país y a nivel global.

Desventajas

Pese a que existen gran variedad de ventajas, no todas son buenas noticias, ya que estos árboles requieren diferentes cuidados entre ellos, mantenerlos hidratados, alejarlos de fuentes de calor y pulverizar agua sobre las ramas para que no se sequen; en caso de no cuidarse bien, las hojas pueden comenzar a caer en pocos días.

Además, el costo en la mayoría de estos es mucho más alto que uno artificial, más que todo los de mayor tamaño; a diferencia de un árbol sintético que puede durar varios años, el natural no cuenta con esta facilidad dado que, se puede utilizar tan solo un diciembre.

El árbol natural ha tomado fuerza últimamente; sin embargo, la elección en gran medida es dependiendo de la prioridad familiar. Mientras los artificiales ofrecen practicidad y durabilidad, los naturales aportan un componente ambiental y estético a pesar de sus precios elevados y de los cuidados que este implica en esta temporada navideña.

Consejos para cuidar la decoración

Para mantener un árbol de Navidad natural en buen estado durante toda la temporada, es fundamental tener algunos cuidados importantes para garantizar su frescura y apariencia. Debe cortar cerca de un centímetro de la base del tronco antes de colocarlo en el soporte, ya que esto facilita la absorción del agua; además, debe ubicarlo lejos de fuentes de calor como estufas, radiadores o ventanas donde reciba sol directo, porque el exceso de temperatura acelera el secado de las ramas; también debe mantener siempre agua en el recipiente de la base.