Es la primera vez que una Primera Dama entra en plena zona roja del conflicto en una misión humanitaria. María Clemencia Rodríguez de Santos irrumpió ayer en tres municipios de Cauca, armada de 1.794 tabletas electrónicas, libros, morrales y juguetes. Las sonrisas de los niños de Silvia, Miranda y Morales justificaron el riesgo.