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De acuerdo con la funcionaria, desde que el Ministerio de Salud anunció en octubre la liquidación de Caprecom, se llegó al acuerdo de que la Superintendencia haría un acompañamiento a los municipios para el traslado del personal a otras EPS.
Sin embargo, la cartera municipal ha radicado cuatro comunicaciones solicitando el acompañamiento y la respuesta recibida por la Supersalud ha sido: “Su solicitud ha sido radicada con el número tal”, señaló Peña.
“La situación de los usuarios es caótica. A partir de la reunión que tuve con el Ministro y otras entidades del país cuando se oficializó la liquidación de la EPS, el Ministro dio un plazo de tres meses a partir de octubre para el traslado de los usuarios. Se le manifestó en mil formas que era mucho tiempo, que teníamos pacientes represados en procedimientos sin remisiones oportunas, sin autorizaciones, pacientes de alto costo sin seguimiento de tratamiento y demás y nos dijo que cada municipio presentara un plan de acción. Solicitamos al Ministerio y más a la Supersalud el acompañamiento para el traslado a las EPS de los 52.000 usuarios en el Municipio, hasta el momento llevamos cuatro comunicaciones que han sido respondidas: ‘Su requerimiento y solicitud ha sido registrada con el número tal’”, mencionó la funcionaria.
Además, explicó que si llegara a proceder a efectuar el traslado, se estaría extralimitando en sus funciones.
MUERTE DE PACIENTES
Según Gilma Peña, la Secretaría de Salud está dando trámite al mes entre 100 y 200 tutelas interpuestas por los usuarios de Caprecom exigiendo la prestación de servicios de alto costo.
“Tenemos pacientes que se han muerto, es la verdad. Se ha requerido a la Supersalud y no hemos podido proceder porque sin el acompañamiento me estaría extralimitando, pero lo más grave es que hay de por medio vidas humanas.
“Tuve un caso de una paciente en estado terminal que conocí en el hospital San Francisco, duró dos meses para remitir y terminó en un primer nivel, murió y era para un tercer nivel y nuca fue remitida por Caprecom”, dijo.
De acuerdo con la funcionaria, el gerente territorial de Caprecom, Adam Ruiz, no responde a los llamados de la Secretaría de Salud.
“El Gerente no contesta, nunca da la cara, nunca contesta una llamada, les he enviado 10 mil requerimientos. Si la gente de aquí, de la ciudad, que es de aquí no contesta, no es doliente, menos me van a contestar una unidad central”, concluyó.
Los usuarios de la liquidada Camprecom reciben atención en la USI y en el hospital San Francisco.
