.
Analistas 02/10/2022

Peregrino buen camino

Ramiro Santa
Presidente Sklc Group
La República Más

Mientras el mundo se enerva ante el debate del agravamiento de la guerra, la crisis energética por la escasez de gas y el cambio climático, hay personas que buscan un oasis de paz cultivando su espiritualidad.

Hace años no se veía tanta afluencia en los caminos para llegar a Santiago de Compostela donde están los restos de este apóstol, hijo de Zebedeo y Salomé y conocido como “el hijo del Trueno” por su carácter, que llegó a la Península Ibérica a compartir la palabra de Jesús y que posteriormente se convirtió en ser el primer apóstol muerto por la fe Cristiana en el año 44 DC. por orden del rey Herodes Agripa I. Dos de sus discípulos huyen con sus restos en una embarcación sin timón ni vela donde las corrientes y la providencia los lleva a la costa de Galicia.

Después de ocho siglos de olvido el ermitaño, Pelayo encontró la tumba del apóstol Pablo y el rey Alfonso II de Asturias, el casto, que reconoció la importancia de este hecho y recorrió 320 kilómetros para rendirle el tributo que han seguido millones de creyentes y personas que llegan en peregrinación cumpliendo promesas, pidiendo perdón y favores o agradeciendo dones y milagros. Es así, como paso entre paso, gente de todo el mundo, jóvenes, viejos, sanos y enfermos del cuerpo o del alma se enfrentan a su realidad en los diferentes caminos, Portugués, Primitivo, Frances, Inglés y variaciones. Todos caminan en silencio pero hablándole a su Dios donde solo hay peregrinos amables y solidarios en unos paisajes de una belleza increíble.

Hay quienes van con prisa, otros con tranquilidad, unos con metas de tiempo y distancia, otros solo con deseos de sanar el alma o conocerse mejor y otros hacen turismo con curiosidad.

Todas las nacionalidades e idiomas deseándose “buen camino” y ante algún tropiezo todos ofrecen con auténtico interés lo mejor que tienen; desde un consejo hasta una venda, medicina, morral, bastón o un hombro para llorar. Por su parte los lugareños siempre amables, dispuestos y consientes de la importancia económica para ellos, los gobiernos locales, regionales y para el país.

En cuanto a las enseñanzas personales, los peregrinos afirman que el Camino de Santiago es como la vida, que es muy importante escoger el compañero para viaje por esta tierra, pero que a otros les va mejor solos; que es gratificante ir con amigos del alma para compartir momentos importantes, aunque no todos lleguen hasta el final; que siempre hay nuevos compañeros en el camino que acompañan, así sea en silencio; que a veces se sube y a veces se baja; que es importante parar para disfrutar o para descansar cuando se está agotado; que a veces se equivoca de camino y hay que regresar; que cada persona resuelve qué carga llevar; que muchos que te ayudan cuando necesitas no los conoces; que en tu morral lo que más pesa es inútil; que lo que realmente importante es poco y no pesa; que por rápido que vayas siempre hay alguien más veloz, que subir cuesta esfuerzo pero bajar lastima y usted es el único responsable por su bienestar.

Son millones de euros anuales que dejan los peregrinos en los hostales, las posadas, los restaurantes donde pueblos enteros viven de ese turismo espiritual de a pie, de a caballo o en bicicleta; que entienden, comprenden y aprecian la belleza. Con tanto paraje hermoso, historias y leyendas en cada pueblo de Colombia debería también ofrecer circuitos de peregrinación para caminantes, admiradores de la naturaleza, gente con espiritualidad que cobijados por el maravilloso cuidado de las comunidades lugareñas podrán tener nuevas experiencias gastronómicas, naturales, culturales y espirituales.

Conozca los beneficios exclusivos para
nuestros suscriptores

ACCEDA YA SUSCRÍBASE YA