Impulsando la economía popular y solidaria

Históricamente la economía popular y solidaria ha convivido con la estigmatización. Los mitos a su alrededor, como la informalidad, la ilegalidad, entre otros, han obstaculizado el fortalecimiento de ese segmento socioeconómico. ¡Craso error! La economía popular y solidaria no solo es un sector dinamizador de la economía, sino que representa una porción relevante en todo el territorio nacional.

En Bogotá y la región las cifras así lo indican. El 99,3% del tejido empresarial son micro, pequeñas y medianas empresas, de las cuales el 92,9% son microempresas. Por eso, decidimos hacer una caracterización de la economía popular para entender bien su ADN. Una de las herramientas que usamos desde la Cámara de Comercio de Bogotá fue la Encuesta del empresariado y la economía popular 2024, según la cual el 77,8% de los negocios con registro mercantil en Bogotá y región se reconocen como parte de la economía popular.

Este porcentaje de participación demuestra la pertinencia de trabajar para derribar los mitos. El primero de ellos es que la economía popular y solidaria es sinónimo de informalidad. Eso no es cierto. Tampoco es verdad que se deba confundir con la ilegalidad. Por el contrario, quienes integran la economía popular son colombianos honestos que a diario obtienen el sustento con el sudor de su frente.

Existe la falsa creencia de que quienes hacen parte de la economía popular carecen de conocimiento. Puede que muchos colombianos que enriquecen la economía popular no hayan accedido a la educación superior, pero se han hecho a pulso. Son emprendedores y empresarios con historias de perseverancia, cuyos saberes han sido transmitidos de generación en generación.

Al caracterizar a la economía popular también hay que establecer cuáles son sus dolores y los de sus negocios. Este proceso de caracterización se traduce en decisiones informadas y en el perfeccionamiento del criterio para acompañar y brindarle asesoría experta a la economía popular y solidaria.

Es clave que ese sector pueda acceder a educación, especialmente en alfabetización digital y en temas cruciales como la inteligencia artificial. También es fundamental que se integren al sistema financiero, accediendo a crédito para impulsar el crecimiento de sus negocios.

Conscientes de estas realidades, desde la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) estamos jugados por la economía popular y solidaria. De modo que desarrollamos e implementamos una estrategia integral que responda a sus necesidades.

Así nace +Talante, el primer evento concebido para la economía popular y solidaria, que este año llega a su segunda edición. Allí los asistentes encontrarán asesorías, charlas de expertos, conexiones financieras y laborales, además de una muestra comercial de más de 600 negocios de este segmento económico, todo con acceso gratuito. El encuentro se celebrará del 17 al 20 de julio en Ágora Bogotá - Centro de Convenciones.

El llamado es a que, desde el gobierno nacional, la sociedad civil, la academia, las administraciones locales y departamentales, los gremios y demás actores, sumemos esfuerzos para potenciar la economía popular y solidaria. Estoy convencido de que, saldando esa deuda histórica, transformaremos realidades e impulsaremos el crecimiento económico de nuestra nación.