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La tenacidad y creatividad de nuestros empresarios en Colombia para hacer ingeniería, desarrollar tecnología, generar empleo de calidad, mejorar desde su misión la calidad de vida de todos, para servir de soporte al aparato productivo y adicional sobreponerse a tantos retos que se les presentan para lograr sostenerse y desarrollar sus empresas, son fantásticos.
Hace cerca de 30 años comencé mi vida laboral en áreas técnicas en una planta productora de bebidas, más por casualidad que por convicción, y desde entonces disfruto, en paralelo al desarrollo de mi vida profesional en el mundo de los negocios, todo lo que encierra hacer empresa y admiro profundamente a quienes se enfrentan a ello.
En este recorrido he interactuado con muchos empresarios, líderes de compañías, unas pequeñas, otras medianas y otras grandes, todas con grandes fortalezas, y en todos he encontrado atributos similares, y entre los que más destaco, son la gran calidad de la ingeniería para desarrollar productos y servicios de talla internacional, y la tenacidad y pasión con la cual desempeñan su labor.
A partir de hoy comenzaré a compartir con ustedes, historias de las empresas y empresarios colombianos, con la convicción que, al presentarlas, muchos emprendedores se acercarán a ellos para ser inspirados y con base en la experiencia adquirida, continuar desarrollando nuestro país por el camino de la tecnología y los servicios.
Una de esas empresas, fundada y liderada por el ingeniero y empresario, Darío Franco, es Equitrónica, quien a través de su liderazgo representa el “Ser Empresario”. Fundada en Bogotá hace cerca de 34 años, hoy es uno de los fabricantes nacionales de mayor prestigio en el mundo eléctrico, de equipos que nutren la industria para que sus sistemas eléctricos operen de manera segura y eficiente.
Dice Darío: hubo una generación de jóvenes profesionales con unas ganas inmensas de “salir adelante” basados en una profesión o en un conocimiento o, incluso, en una sensación de capacidad infinita de hacer empresa, pero al mismo tiempo, con un conocimiento muy limitado para hacerlo.
Tuvo la idea de crear una empresa basado en la necesidad de sostenerse y en la convicción de que se crea mucha más seguridad y futuro en equipo, que solo contra el mundo.
Continúa su relato. “Ser empleado no era para mí, pues necesitaba un jefe de quién aprender y esto ya era mucho pedir (...) Entonces, aprender al enfrentarme a los retos de la vida diaria, de los clientes, de aceptar hacer y construir aquello que otros no querían hacer, así nació Equitrónica.
Si nos regresamos 34 años, en nuestro país había una gran ingeniería, pero que apenas empezaba a regularse en temas eléctricos; en Colombia había estándares, pero no era común aplicarlos; a partir de allí Equitrónica comenzó a desarrollar tecnología, produciendo equipos de alta calidad.
En un principio Equitrónica desconocía diversos aspectos administrativos, legales, contables, lo cual aprendió en el camino. Dijo Darío que, si al principio hubiese sabido que todo esto era necesario, con toda seguridad hubiera desistido…definitivamente Ser Empresario es una vocación.
Durante sus más de tres décadas, Equitrónica ha desarrollado productos y conocimiento en temas de generación y distribución de energía y ha atendido importantes proyectos en industria pesada, empresas de energía e infraestructura, principalmente a nivel nacional y algunas exportaciones.
Dialogar con Darío Franco, es encontrar un líder inspirador, un empresario hecho “a pulso”, optimista de nuestro futuro como país, una excelente persona y con muchas experiencias por compartir para guiar a nuevas generaciones.
