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Las estrategias de competitividad son un poderoso instrumento altamente correlacionado con los aumentos en productividad, crecimiento económico, inversión y bienestar social. Por esto, definir una agenda, hacerle seguimiento permanente y fortalecer la institucionalidad, son elementos imprescindibles para avanzar en la meta 2030 de ser uno de los países más competitivos de América Latina.
Si bien el Gobierno Nacional durante los últimos años, ha logrado avanzar en materia de institucionalidad, se requiere hoy consolidar de una manera más decidida una mejor articulación entre el Sistema Nacional de Competitividad e Innovación y el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. La apuesta de la gobernanza debe reflejar lo que hoy demuestran las cifras de las convocatorias en el Fondo Ciencia, Tecnología e Innovación del Sistema General de Regalías, donde 32 departamentos decidieron apostarle a proyectos en la línea estratégica “innovación para la productividad, competitividad y desarrollo social”.
En esta ruta, la Consejería Presidencial para la Competitividad, presentó una propuesta establecida en el marco del Proyecto de Ley del PND 2018-2022, con el propósito de generar una mayor articulación entre los diferentes Sistemas en el marco general del Sistema Nacional de Competitividad e Innovación; estableciendo un mecanismo en donde estos sistemas: el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación - Sncti; el Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria - Snia; la Comisión Intersectorial de Propiedad Intelectual -Cipi; el Consejo Nacional de Economía Naranja -Cnen; el Sistema Nacional Ambiental -Sina- reportarán a través de la Comisión Nacional de Competitividad e Innovación al Presidente de la República, con el fin de coordinar la elaboración, implementación y seguimiento de la Agenda Nacional de Competitividad e Innovación.
Asimismo, a nivel territorial, como un espejo del Sistema Nacional, las distintas instancias regionales, departamentales y territoriales, se articularán en las Comisiones Regionales de Competitividad e Innovación con el objetivo de fortalecer la competitividad. Propuesta que incorpora la heterogeneidad territorial en la construcción de agendas regionales de competitividad e innovación específicas para cada Departamento, bajo el entendido que no hay recetas únicas para el desarrollo competitivo a nivel regional.
Finalizando este año se contará con 32 agendas regionales construidas, gracias al liderazgo del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo; Confecámaras y el apoyo de los programas de cooperación internacional de Suiza, Reino Unido, la Unión Europea y el Banco de Desarrollo de América Latina - CAF.
Es así como en la articulación, encontraremos las sinergias para caminar hacia un mismo norte, con una hoja de ruta definida y compartida. Para que cada sistema, con sus aportes individuales, pero integrados en un propósito de desarrollo común, avancen para lograr la visión 2030 de ser la tercera economía más competitiva de América Latina.