Invertir en la comodidad de las madres es buen negocio

Las mujeres constantemente se ven enfrentadas al mismo dilema: escoger la vida de madre o la de alta ejecutiva.

Sin embargo, en el país y en el resto del mundo estas dos opciones ya no son excluyentes y con ayuda de los programas adecuados en las empresas, todos los empleados pueden decir que su jefe es literalmente una madre.

La clave detrás de tener madres en roles importantes yace en crear empleados que estén fidelizados con su compañía; una práctica que se puede duplicar tanto para hombres como para mujeres (después de todo no falta el papá que actúa de madre). Actualmente, por ejemplo, 63% de las mujeres buscan un trabajo donde encuentren un balance perfecto entre lo laboral y lo personal.

Para lograr este objetivo las organizaciones deben moldearse según las necesidades de sus empleados y atenderlas de la misma manera que atiende las preocupaciones de sus clientes, así lo aseguró Catalina Mora gerente comercial de GoIntegro, una compañía que ofrece plataformas para el desarrollo de programas de recursos humanos. “Cada vez más se está descubriendo un costo oculto porque las empresas no sabían lo importante que es cuidar el capital del conocimiento y la rotación de empleados”.

La rotación de empleados es donde está la ganancia de invertir en la felicidad de las mamás de la empresa. Las madres empleadas son particularmente valiosas para las organizaciones ya que estas reflejan de cierta manera el promedio de los clientes. Son ellas quienes manejan los presupuestos de las casas y quienes toman la decisión de los productos que se usan. Tenerlas como parte de la compañía se traduce en un valor agregado. Según, GoIntegro una mujer ejecutiva puede generar una rentabilidad más alta en comparación a una empresa que no tiene mujeres al mando.

Además, es importante mantener a estas líderes felices, para de esta manera evitar los costos de tener que invertir en la capacitación de un nuevo empleado.

Mora explica que cuando una compañía tiene una alta rotación de empleados en el largo plazo, esta estará invirtiendo un alto capital en la capacitación de los nuevos trabajadores y perderá las ganancias potenciales que generaría un empleado que haya superado la curva de aprendizaje. “Los planes de beneficios e incentivos para trabajadoras determinan la productividad y la eficacia de sus gestiones”, dijo.

Para lograr enganchar a las madres en las empresas el secreto está en interesarse por ellas y sus familias, aseguró Luis Fernando Martin, experto en consultoría y comunicación organizacional. “Se trata de tener horarios flexibles para las mamás con hijos de cierta edad para que tenga un desarrollo personal y tiempo con ellos”. Además Martin puntualizó que también se debe invertir en la educación de las madres, lo cual puede incluir talleres de inteligencia emocional, clases sobre el manejo de finanzas del hogar y escuelas de padres.

Mora asegura que en el país las mujeres se están acercando un poco más a lograr un equilibrio ya que hay una tendencia entre las organizaciones para proporcionarle a sus empleados un “salario emocional”. Este incluye beneficios que aunque tengan un valor monetario son entregados a los trabajadores como un bono sobre su remuneración básica.

La idea de este nuevo tipo de salario es mantener al empleado satisfecho y reconocer su trabajo. Según un estudio de Gallup, 78% de los trabajadores aseguraron que se esfuerzan más cuando son reconocidos y esa misma cantidad recomendaría el servicio o producto de la empresa cuando los satisface su trabajo.

Latinoamérica busca mujeres en la cima
Según un estudio publicado por Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (Ipade Business School) en México, las mujeres han aumentado su participación en las fuerza laboral pero aun se quedan cortas de alcanzar la punta de la montaña y tomarse los puestos ejecutivos. Sólo 6,8% de los trabajos directivos en Latinoamérica son ocupados por mujeres a comparación con Estados Unidos donde 24% de los lugares son llenados por el género femenino. En el informe Poder corporativo en América Latina’, del Simmons Graduate School of Management e Inter-American Dialogue, Colombia es el país con más mujeres en puestos gerenciales, seguido por México.

Las opiniones

Catalina Mora
Gerente Comercial de Gointegro
“Las personas y las madres pueden ser más productivas si trabajan, por ejemplo, media jornada sabiendo que podrán ir a ver a su hijo después de las dos de la tarde”.

Luis Fernando Martín
Experto en consultoría y comunicación organizacional
“Los derechos y beneficios para las mujeres es un tema que se ha logrado más a regañadientes que por voluntad propia, pero es algo que se está empezando a generar”.