Con James, se catapulta la exportación de futbolistas

Con James Rodríguez, el botín de oro pasó de ser un trofeo para convertirse en una realidad exportadora de jugadores colombianos de fútbol en las ligas más importantes.

No es la primera vez que un jugador nacional llega al Real Madrid, pero sí es el más costoso y se tienen amplias expectativas con los premios y reconocimientos del Mundial. Por el delantero Edwin Congo, el club pagó US$7,4 millones, en 1999, y Freddy Rincón que de 1995 a 1996 también jugó en el equipo español.

Los cálculos llegan a 400 deportistas del balompié colombiano que mueven corazones a nivel internacional, y aunque la presencia regional es mayor, en número de jugadores, en países como Venezuela, Panamá , Perú y Argentina, las ligas más importantes de fútbol ya tienen en sus nóminas, al menos, a 31 jugadores.

Es el caso de Alemania (4), Italia (14), Inglaterra (3) y España (7), según explicó uno de los fundadores de colombiagol.com.co, Sebastián Heredia.

Las últimas transferencias también relevantes, aunque ninguna cercana al valor de James de US$108,1 millones, fueron las de Adrián Ramos, quien fue del Hertha Berlín al Borussia Dortmund, por un valor cercano de US$13,4 millones; Stefan Medina, del Atlético Nacional al Monterrey, US$4,5 millones, y Pablo Armero pasó del West Ham United al Udinese, que no tuvo un valor de transacción a su regreso.

De David Ospina y Juan Guillermo Cuadrado también se rumoran transacciones, el primero al Arsenal y el segundo, al Barcelona Fútbol Club.

Andrés Charria, abogado especialista en representar a jugadores y deportistas, reconoce que las transferencias han cambiado y que James ha marcado un hito en los jugadores de fútbol nacionales.

En últimas, recordó que Falcao García es un jugador que no fue formado en Colombia, sino en Argentina, así que si bien hay que reconocer su labor a nivel mundial, su cuna deportiva tiene otro origen. “A los 13 años empezó a jugar internacionalmente y llega a Colombia cuando es goleador en River Plate”.

Clave es decir que de los 23 jugadores convocados al mundial, solamente tres, entre ellos dos arqueros, juegan en equipos colombianos y es evidente que Farid Mondragón ya cerró con broche de oro su carrera deportiva.

Esto indica que es una generación diferente cuando de fútbol se trata pues si se recuerdan las grandes transferencias colombianas en tiempos pasados no superaban los US$12 millones, recalca Charria.

Heredia sostuvo que “hay más vitrina para los jugadores y sí ha crecido su presencia en clubes internacionales”.

De hecho, en el reporte de 2012, las transferencias colombianas se posicionaban en quinto lugar con 319, después de países como Brasil, Argentina, Reino Unido y Francia.

Lo que hay mucho es movimiento de jugadores colombianos en el exterior, hacia Europa, de jugadores jóvenes, sostiene Charria, abogado deportivo.

Sobre todo, comenta, las transferencias que se hacían anteriormente han cambiado de manera impresionante, pues incialmente se realizaban en equipos poco relevantes para el fútbol mundial.

Es el caso del “Pibe Valderrama con el Montpellier, con un equipo menor, eran clubes que no tenían gran arraigo”, señala el experto. Igual sucedió con Leonel Álvarez y René Higuita cuando llegaron al Real Valladolid.

Jugadores en equipos locales, en la mira
Los jugadores que están en equipos de la Liga Postobón, que enfrenta a equipos nacionales, también están en la mira de otros clubes del mundo. Es el caso de Sherman Cárdenas, actual futbolista volante del Atlético Nacional, que podría llegar pronto al Boca Juniors en Argentina. El pase del colombiano sería comprado para reemplazar la salida de Juan Román Riquelme. Aunque no se ha confirmado la compra, se rumora que el equipo dirigido por Carlos Bianchi podría pagar hasta US$3 millones por Cárdenas.

La Opinión

Andrés Charria
Abogado deportivo
“La transacción de James es la muestra desus resultados del Mundial. Sin duda, hoy los jugadores colombianos son más profesionales que en la época del Pibe Valderrama”.