En 15 días este 2012 llegará a su final con un buen balance para la economía de colombia y con muchos retos de cara a 2013
La posibilidad de que sucedan cosas improbables e impredecibles, de gran magnitud y consecuencias, se conoce en economía como ‘Cisne Negro’, una teoría enunciada por Nassim Nicholas Taleb, mediante la cual se busca demostrar el alto impacto de eventos atípicos, que al final del año -época de balances y propósitos- es ideal para planear y proyectar. En ese orden de ideas, surgen preguntas sobre ‘Cisnes Negros’ que a muchos les rondan en sus cabezas: ¿podrá Colombia convertirse en la tercera economía de la región? ¿Llegará el dólar a $2.000? ¿Veremos algún día a EPM como una de las compañías que más brille en la Bolsa de Valores de Colombia? ¿Cuántas sociedades comisionistas sobrevivirán en el mercado local? ¿Habrá en la escena política nacional un partido de la guerrilla?
Son algunas situaciones que, aunque parezcan inauditas e irreverentes, podrían suceder en los próximos años y tener un impacto importante en el rumbo de la economía. Los responsables de la conducción de la economía somos todos los protagonistas institucionales: gobiernos locales, regionales y nacionales; empresarios grandes, pequeños y medianos; autoridades de control y vigilancia; banca central; medios de comunicación, entre otros pilares no menos importantes. De la interrelación entre todos los agentes depende mucho del futuro de la economía colombiana, que hoy por hoy goza de una gran dinámica que es referente en la región. El crecimiento será bueno en un año marcado por la recesión internacional; el desempleo está anclado en un dígito en la mayoría de los centros urbanos; la inflación ha dejado de ser el mayor impuesto que pagan los colombianos de menor poder adquisitivo, y las exportaciones de bienes y servicios a más de 50 países están repintando el mapa industrial del país.
¿Qué nos hace falta para que cualquier plan sea posible? Colombia debe revestirse de institucionalidad en todos los frentes; deben mejorarse la competitividad educativa e investigativa científica, y la innovación debe dejar de estar solo en presentaciones de power point. Los primeros que deben entender los retos del desarrollo y del necesario camino hacia el bienestar de todos los colombianos son los políticos y los funcionarios públicos, quienes tienen por obligación encaminar al país, darle la estructura para que los empresarios puedan generar empleo, pagar más impuestos y desarrollar la responsabilidad empresarial.
Sin funcionarios públicos y políticos responsables e idóneos, el país seguirá en la espiral de la corrupción e incompetencia que generan grupos armados al margen de la ley y traumatiza todas las relaciones sociales. Ojalá el ‘Cisne Negro’ de tener una cultura política técnica y honrada nazca este 2013.
