Acabamos de conmemorar en La República la entrega de la distinción “Empresario del Año 2012”, por parte de los más representativos CEOs del país. Un galardón meritorio, porque es escogido entre los propios competidores.
Empresas y presidentes fueron evaluadas punto a punto, porque ganaron dinero según sus balances del año pasado y por su aporte a la generación de empleo e innovación con adquisición de nueva infraestructura productiva, tarea nada fácil estos tiempos de crisis económica.
Carlos Raúl Yepes Jiménez, presidente del Grupo Bancolombia, fue “coronado” por sus propios colegas como el empresario colombiano del año, un cargo que recibió de manos del curtido hombre de negocios y banquero Jorge Londoño, quien dejó muy en alto esa encumbrada posición.
Yepes comprobó por qué fue elegido al mostrar su talante con un breve discurso acerca de la humanización de la banca, su importancia para la sociedad y sobre los valores humanos. Igualmente fue claro en que los logros, más que de un líder son de su comunidad.
El banquero mostró su preocupación por el país al pedir que empecemos ya a hacer algo por el país, con vista a una posible solución del conflicto mediante la inclusión social. En esa tarea deberíamos estar todos los colombianos.
A Yepes le toca honrar su distinción mientras ostenta una fuerte responsabilidad frente a una entidad bancaria líder en Latinoamérica y como guía de los 4.200 empleados de la sede principal de Bancolombia, en Medellín, con otros tantos en el país y Centroamérica para responder a ocho millones de clientes en los siete países que opera.
Bancolombia, el más grande del país con $98 billones en activos y $11,6 billones en patrimonio está ahora bajo el mando del mejor empresario de Colombia. Un hombre joven que todavía no ha llegado al medio siglo. Es decir con futuro promisorio.
Dijo Yepes en una entrevista: “estos premios me dan como pena, como vergüenza” y agregó que quiere “ser más para servir mejor”. Con ese lema, cualquiera entiende cómo este joven colombiano puede responder ante el país por el liderazgo de los empresarios del país. Es un empresario y colombiano de corazón.
Yepes la tiene clara, pese a la posición que ostenta, la familia y amistad son primero y como él mismo lo reconoció “no tienen precio”.
Como presidente de una entidad como Bancolombia, para el país es vital la defensa que Yepes hace de la educación como herramienta para que “la pobreza no atrape el talento”. Confiamos en que su liderazgo lo ejerza para apoyar este sector que el país tanto requiere para mejorar el crecimiento económico y social.
Yepes, elegido Empresario del Año La República en su edición 10 en competencia con sus colegas de Bogotá, Barranquilla, Medellín, Cali y Pereira, quienes con sus empresas fueron evaluados según la generación de empleo, desarrollo, innovación, responsabilidad social empresarial, utilidades y ventas, e inversión en infraestructura.
El nombre de Yepes fue escogido entre pesos pesados de la economía nacional como David Bojanini, presidente del Grupo Sura; José Francisco Arata, de Pacific Rubiales; Juan Luis Aristizábal, de Conconcreto; y Álvaro Saieh, accionista de Corpbanca Colombia, de acuerdo con el ranking de las empresas más mencionadas en La República, periodísticamente durante en 2012.
Fueron cientos los escrutados, pero siempre debe haber un elegido.
Sin duda hay muy buena cosecha de presidentes y gerentes en Colombia.
Es por lo anterior que el trabajo de Invamer Gallup entre los 200 ejecutivos consultados, permite reflejar la responsabilidad de ser el mejor del 2012, pero con mucho futuro por los años de trabajo que quedan en frente, todos en bien del país.
