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Entre frenar y acelerar, sobrepasar y curvear, está la competencia ‘Imsa Gt’ del automovilismo profesional del globo, en la cual participa Gustavo Yacamán, un joven de 23 años que espera retornar a sus patrocinadores US$15 millones.
Este piloto caleño pertenece al equipo Oak Racing, y es patrocinado por 13 organizaciones colombianas como: Lubricantes Coéxito, (el mayor auspiciador), Crepes & Waffles (quien hizo el mayor patrocinio el año pasado), Tecnoquímicas, Allianz, Biomax, Cine Colombia, Siesa, Epsa, Marca País, Alcaldía de Cali, Oakley, Coldeportes y Gases de Occidente.
Hay que destacar la actuación en años pasados, pues en 2012, el ‘Tigrillo’ (como es llamado por las cadenas de televisión norteamericanas) logró retornar a sus patrocinadores US$20 millones, en 2013 US$6,5 millones y en 2011 tuvo el retorno más bajo con US$5,6 millones.
“Durante este año esperamos un retorno de ganancias a mis patrocinadores entre US$10 y US$15 millones”. Dijo Gustavo Yacamán.
El piloto explicó que el retorno será de 30% en ventas que realizarán las marcas y de 70% en ganancias por el uso de su imagen en campañas publicitarias o de responsabilidad social empresarial.
“Es una asociación interdependiente entre el piloto y las compañías, debido a que Yacamán necesita un soporte económico para demostrar su talento y las empresas se benefician cuando él triunfa, ya sea en imagen o en ventas”, dijo Nelson Gómez, experto marketing.
Sin embargo, siempre hay riesgos en estas estrategias de negocio, ya sea por accidentes o malos desempeños.
'El riesgo más grande sería perder a mis patrocinadores, siempre tengo que dar lo mejor de mí, no solo al volante sino en las campañas que realizo con las organizaciones” aseguró Gustavo Yacamán a LR.
Pero si de campañas se trata, la vigencia es el rol más importante de cualquier deportista para mantener su reputación con las personas que confían en él y su talento.
“La vigencia de un deportista que trabaja tanto en el podio como en la interacción social, es muy importante para ser reconocido, más aun cuando todas sus marcas son colombianas”, expresó María Alejandra Peñalosa, analista de publicidad.
Siendo tan necesaria la vigencia para poder llegar a los US$15 millones, el piloto profesional asegura que “ el trabajo se traduce en viajes constantes a Colombia, ya sea sembrando arboles, aconsejando las personas para evitar accidentes de tránsito o conferencias sobre positivismo laboral”.
Ya teniendo claro el modelo de negocio, las personas podrían pensar que un piloto profesional de esta categoría podría ganar mucho dinero, “ la verdad es que un piloto profesional de mi categoría gana en base al ‘price money’ (premios) entre US$200.000 y US$3 millones anuales, dependiendo del equipo en el que se compita”.
Sumado a esto, hay valores que resultan muy costosos para un equipo como el de Yacamán “un automóvil puede costar entre US$500.000 y US$1 millón, pero llevarlos a competir en las pistas US$5 millones anuales” dijo Alejandro Pamplona, vocero oficial del piloto en Colombia.
Los principales contrincantes de Gustavo Yacamán
Competir y sobrepasar los demás corredores se convierte en un reto en la pista. Más para el corredor Colombiano, que tiene como principales contrincantes a Ricky Taylor y Jordan Taylor con el equipo Wayne Taylor Racing, pues ellos están como líderes en el campeonato Imsa. Seguido del equipo Action Express Racing integrado por Christian Fitipaldi y Joao Barbosa, de segundos, y de terceros el equipo Chip Ganassi Racing con los corredores Memo Rojas y Scott Pruett. El colombiano va de cuarto en el campeonato, pero “tenemos como meta mínima estár entre los tres primeros en la clasificación”, dijo Yacamán.
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