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Nuevas medidas de Spotify
Como parte de los esfuerzos, la compañía realiza limpiezas diarias para eliminar reproducciones artificiales de las cuentas públicas de la aplicación
Spotify ha reforzado las políticas para evitar que su biblioteca se llene de música generada de manera artificial y con prácticas que distorsionen la escucha genuina de los usuarios.
Ante esto, la compañía define como “transmisión artificial” cualquier reproducción que no refleje la intención real de escucha, incluidos los intentos de manipular la plataforma mediante procesos automatizados como bots o scripts. Por esta razón, la empresa invirtió en ingeniería e investigación para detectar y mitigar estos conflictos.
Como parte de los esfuerzos, Spotify realiza limpiezas diarias para eliminar reproducciones artificiales de las cuentas públicas de la aplicación ya que, entre las principales consecuencias de identificar estas prácticas incluyen la retención de regalías asociadas, la corrección de cifras de reproducciones en los perfiles de artistas y la posibilidad de retirar canciones de listas de reproducción.
Sin embargo, en algunos de los casos más graves, la plataforma podrá eliminar directamente el contenido manipulado o suspender también las cuentas vinculadas a transmisiones que contengan tipos de fraudes.
Por otro lado, la compañía ha establecido cargos dirigidos a sellos y distribuidoras cuando se detectan niveles flagrantes de transmisión artificial en sus catálogos, esto busca desincentivar que actores recurran a la manipulación de reproducciones y evitar que se desvíen ingresos de artistas legales.
Con estos sistemas de monitoreo, sanciones y cargos, Spotify busca impedir que su biblioteca se vea saturada por contenidos creados o impulsados artificialmente.