MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Agregue a sus temas de interés
Hay un presupuesto de $27.920 millones para este tipo de infraestructura
De los 427 puentes que reposan en la ciudad de Bogotá, este año han recibido mantenimiento al menos 44 de ellos, según afirmó el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU).
De acuerdo con la entidad, en 2017 se destinó un presupuesto de $23.600 millones para el mantenimiento de los pasos a desnivel, y otros $4.320 millones para el reforzamiento estructural de los puentes que necesitan atención más urgente. De esta manera, solo en 2017 el presupuesto del Distrito para estos pasos peatonales es de $27.920 millones.
“Lograremos el mantenimiento de 157 puentes peatonales el próximo año (2018). De los 116 que hay asociados a Transmilenio, vamos a atender 108, es decir 93% de los puentes peatonales del sistema. El proceso está en pliegos y se adjudicará este año”, dijo Yaneth Mantilla, directora del IDU.
Sin embargo, la misma unidad de desarrollo urbano informó que el presupuesto total necesario para el mantenimiento de los 427 puentes peatonales es de $93.767 millones, por lo que, descontando $23.600 destinados en 2017, habría que invertir $70.167 millones para los restantes 383 pasos peatonales, en caso de que la administración actual quisiera dejar todos los puentes restaurados antes de terminar 2019.
A pesar de esto, según afirmó el IDU, ya se cumplió con 94% de la meta en la actual administración: hacer en cuatro años el mantenimiento de 50 puentes peatonales. Así mismo, afirmó la entidad, que en los planes todavía está hacer mantenimiento a otros 35 puentes, que en principio recibirán mantenimiento en 2018, pues este año se hará la radicación del proceso para iniciar con el trabajo.
“Hay dos tipos de mantenimiento: preventivo y correctivo. En general no debería haber mantenimiento correctivo. Si prevalece un programa organizado para hacer solamente preventivos, por ejemplo cada seis meses, no deberían necesitar correctivos, porque implica que hubo daños y no se hizo a tiempo. Pero en Bogotá hay un porcentaje muy alto que necesita correctivo, lo que podría general accidentes o que los usuarios no lo utilicen”, explicó Néstor Sáenz, ingeniero de transportes y vías, y profesor pensionado de la Universidad Nacional.
Otro tema importante, explicó Sáenz, es que sería importante que las personas de movilidad reducida pudieran hacer auditoría a los puentes, para cerciorarnos de que todos los podrán utilizar.
