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La nueva administración ha demostrado una capacidad y conocimiento técnico en todos los aspectos que exige una urbe como Bogotá. La invitación a nivel normativo es a combinar la importante experiencia urbanística, con lo que la practica hoy nos muestra en algunos sectores en donde se deben tener normatividades especiales para darle un giro a estas zonas de la mano del sector privado.
En ese sentido, para Oikos vital que se formulen políticas para promover la renovación urbana, pues actualmente es difícil hacerlo mientras el distrito no ofrezca las herramientas jurídicas y normativas para llevarlo a cabo. Por ahora, la expectativa del empresario está puesta en el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT) para conocer cómo se puede apoyar desde lo privado el desarrollo urbano de la ciudad.
Las políticas de renovación urbana han sido defendidas por importantes y reconocidos urbanistas, sin embargo, aunque la teoría parece ser correcta, en Bogotá en los últimos 15 años se ha generado en zonas aptas para la renovación deterioro, desolación, aumento de pequeñas calles del cartucho regadas por todo el centro donde solo se fomenta el robo, la drogadicción, prostitución y negocios ilegales. Es por esto que toma relevancia el llamado al Distrito para que tenga presente que la situación existente del centro ampliado con respecto al tamaño de los predios, hace imposible que el sector privado vea interés en renovarla.
El Distrito puede gastarse su presupuesto anual tratando de limpiar calles y cerrando sitios ilegales, pero mientras no exista una legislación que incentive al sector privado para desarrollar nuevos proyectos y así mismo a los propietarios de estas atomizadas tierras a vender, los esfuerzos del distrito serán de muy bajo resultado en el mediano a largo plazo.
Oikos siempre ha buscado apoyar los esfuerzos que hace tanto el Gobierno Nacional como el Distrital, por eso la apuesta es al desarrollo de proyectos que ofrezcan soluciones integrales y sostenibles no solo para los clientes si no para la ciudad.
Programas como Casa Ahorro (Vipa), Mi Casa Ya y el subsidio a la tasa de interés para vivienda No VIS, que ahora se promueven en Bogotá, dinamizarán el mercado de vivienda en Bogotá. Sin embargo, estos esfuerzos pueden ser menguados con el incremento de tasas del Banco de la República, buscando lograr la meta de inflación, que ha sido impactada por el aumento del dólar y no por el mismo consumo interno.
Coincide con la visión del alcalde Enrique Peñalosa de pensar en el desarrollo de Ciudad-Región para planear el territorio en términos de vivienda, equipamiento social, transporte, comercio e industria. Parte del desorden que vive hoy Bogotá es generado por la competencia entre la capital y los municipios aledaños.
Este 2016 para el sector edificador será positivo por la dinámica y capacidad de compra que la clase media ha logrado en los últimos años. Esto sumado a los apoyos que el Gobierno ofrece con los subsidios a las tasas de interés. Es por esto que Oikos gracias al amplio portafolio que ha logrado consolidar durante el año espera ventas cercanas a los $500.000 millones.
Hoy la compañía cuenta con proyectos que van desde vivienda de interés social hasta estrato cinco: proyectos como Bosque de Los Alpes en San Cristobal Sur, Portón de Hayuelos en Fontibón, Infinitum en Chapinero, Savanna en Cajicá, Cabo Verde en Ricaurte, Bahía Solero en Ricaurte, entre otros que complementan el portafolio de la compañía.