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El Partido Liberal de Trudeau lideró en 158 de los 338 escaños de la Cámara de los Comunes, con 99% de las encuestas informadas
El primer ministro Justin Trudeau ganó un tercer mandato en las elecciones anticipadas de Canadá, aunque no logró recuperar la mayoría que buscaba, lo que lo obligó a depender de partidos más pequeños en otro parlamento fragmentado.
El Partido Liberal de Trudeau fue elegido o lideró en 158 de los 338 escaños de la Cámara de los Comunes, con 99% de las encuestas informadas. Es un escaño más del que ganó en la última votación de 2019. Los conservadores de la principal oposición, bajo Erin O'Toole, obtuvieron 119 escaños, dos menos que la última vez.
Sin embargo, por segunda elección consecutiva, los liberales perdieron el voto popular frente a los conservadores y ganaron solo debido a una sólida actuación en Toronto, Montreal y otras ciudades.
En general, el resultado deja al parlamento con pocos cambios de lo que era antes de que Trudeau convocara la votación: una minoría estable que le da al primer ministro licencia para continuar con una agenda de grandes gastos preelectorales que ya había recibido respaldo parlamentario a principios de este año.
Además, Trudeau debería encontrar apoyo fácilmente en la legislatura para seguir adelante con nuevas promesas de campaña, como aumentar los impuestos a las instituciones financieras e imponer reglas de emisión más estrictas para el sector del petróleo y el gas.
"Esto apunta a un fuerte apoyo fiscal continuo y un sesgo alcista hacia déficits más amplios en el mediano plazo", dijo Doug Porter, economista jefe del Bank of Montreal, por correo electrónico. "Por supuesto, dado que parece que vamos a tratar con un gobierno minoritario, los detalles seguirán siendo fluidos".
Otras iniciativas que se espera que se presenten rápidamente incluyen nuevas regulaciones que obligarán a los servicios de transmisión de medios y plataformas sociales, como Netflix Inc. y TikTok Inc., a financiar y promover el contenido canadiense. Trudeau había presentado un proyecto de ley para regular el sector en el parlamento anterior que nunca ganó la aprobación del Senado antes de la convocatoria de las elecciones.
En su discurso de victoria, el martes por la mañana temprano en Montreal, Trudeau comparó el resultado de las elecciones con los votantes que enviaron a los parlamentarios "de vuelta al trabajo".
“Te escucho cuando dices que solo quieres volver a las cosas que amas y no preocuparte por esta pandemia o por una elección”, dijo.
La victoria liberal es un hito histórico para Trudeau, ya que es solo la octava vez que un líder canadiense gana tres elecciones consecutivas. El padre de Trudeau, Pierre, también lo hizo. Representa una especie de regreso para Trudeau, cuyo partido estaba a la zaga en las encuestas a mitad de la campaña de cinco semanas.
Pero el resultado también es una reprimenda a la decisión de Trudeau de convocar elecciones anticipadas que muchos canadienses vieron como una toma de poder mientras la pandemia de covid-19 aún continúa. Con más de 90% de las encuestas informadas, los liberales obtuvieron solo 32,2% del voto nacional. Esa sería la proporción más baja para cualquier partido gobernante en la historia de la nación. Los conservadores se situaron en 34%.
Es la segunda vez que los votantes le niegan a este primer ministro el control total de la legislatura, lo que limita su libertad para asumir grandes riesgos o gobernar unilateralmente.
Los resultados reflejan una nación que no está segura de su futuro inmediato en medio de una cuarta ola de la pandemia. Los canadienses están lidiando con niveles crecientes de deuda y están preocupados por una futura transición de una nación productora de petróleo a una economía con bajas emisiones de carbono. Los líderes del partido lucharon por encontrar un mensaje coherente con el que unir al electorado, dijeron los encuestadores.
“Esa es una evaluación condenatoria de los canadienses que están a la vanguardia, que refleja para ellos una falta de opciones inspiradoras”, dijo Shachi Kurl, director ejecutivo del Angus Reid Institute, una firma de encuestas con sede en Vancouver.
Como en 2019, cuando Trudeau perdió su mayoría, el resultado también subraya las divisiones regionales que enfrenta la nación. Los canadienses occidentales ricos en recursos volvieron a votar fuertemente por los conservadores, un partido que apoya más al sector energético. Los quebequenses optaron por enviar a los nacionalistas a la legislatura en grandes cantidades, en lugar de ponerse del lado del partido federalista de Trudeau.
Sin duda, Trudeau tendrá una minoría estable. Tiene múltiples socios potenciales para aprobar legislación, lo que le da al primer ministro la máxima influencia. El Nuevo Partido Democrático obtuvo 25 escaños, mientras que el Bloque Quebecois obtuvo 34. Cada uno tiene suficiente para empujar a los Liberales más allá de los 170 votos en el parlamento necesarios para aprobar la legislación.
Los gobiernos minoritarios se han familiarizado con los canadienses. Las últimas siete elecciones han producido cinco gobiernos minoritarios. Son populares porque requieren la participación de varios partidos para hacer leyes.
Pero hay una desventaja. Los parlamentos minoritarios mantienen a los partidos en pie de campaña constante y les dan menos margen para considerar cuestiones a largo plazo. En la práctica, eso significa que los políticos desconfían de abordar grandes problemas como la debilitada competitividad de Canadá o la lenta transición hacia una economía baja en carbono.
"Los desafíos económicos que tenemos por delante son importantes", dijo por correo electrónico Robert Asselin, vicepresidente senior de políticas del Consejo Empresarial de Canadá. "Vamos a necesitar un enfoque de crecimiento a más largo plazo".
Desde las elecciones de 2019, el índice compuesto de referencia S & P / TSX del país ha subido 23%, apenas la mitad de la ganancia del S&P 500. La moneda canadiense ha tenido el segundo peor desempeño entre las monedas del G-10 frente al dólar estadounidense. El dólar canadiense ganó en los resultados de las elecciones, avanzando 0,4% a C $1,2768 por dólar estadounidense a las 7:16 a.m. en Toronto.
Trudeau tenía en gran parte el control sobre la agenda económica el mes pasado antes de convocar las elecciones, y los tres partidos de oposición en un momento respaldaron su préstamo de emergencia para pagar la respuesta de covid-19.
Los liberales aprobaron un presupuesto en abril con 140.000 millones de dólares canadienses (US$110.000 millones) en nuevas medidas de gasto, con el apoyo del NDP. Incluso los conservadores apoyaron en gran medida las medidas de apoyo a la pandemia del gobierno liberal durante gran parte del año pasado.
Pero la perspectiva de que los liberales se unan a los nuevos demócratas en materia de política podría provocar un giro aún más hacia la izquierda. El NDP quiere aumentar las tasas impositivas sobre los ingresos corporativos y las ganancias de capital, así como sobre las personas adineradas.
El resultado de las elecciones también representó un rechazo de O'Toole, el líder conservador cuya apuesta por acercar a su partido al centro político con una plataforma moderada no logró ganar suficientes votantes para compensar las pérdidas a su derecha. En particular, los conservadores lucharon por lograr avances en los grandes centros urbanos.
“Aquí no hay ganadores”, dijo por correo electrónico Darrell Bricker, director ejecutivo global de Asuntos Públicos de Ipsos.
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