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El presidente de la Fed, Jerome Powell, anticipó los próximos aumentos de los tipos de interés y descartó una recesión en EE.UU.
La Reserva Federal elevó las tasas de interés en el incremento más pronunciado desde el año 2.000 y decidió comenzar a reducir su enorme balance general, desplegando el endurecimiento más agresivo de la política monetaria en décadas para controlar la inflación galopante que está en 8,5%.
El Comité Federal de Mercado Abierto del banco central de Estados Unidos votó por unanimidad aumentar la tasa de referencia en medio punto porcentual. La Fed comenzará a permitir que sus tenencias de bonos del Tesoro y valores respaldados por hipotecas se reduzcan en junio a un ritmo mensual combinado inicial de US$47.500 millones, aumentando en tres meses a US$95.000 millones.
“El comité está muy atento a los riesgos de inflación”, dijo la entidad en el comunicado, y agregó una referencia a los bloqueos relacionados con covid en China que “probablemente exacerben las interrupciones de la cadena de suministro”. Eso se suma a la invasión rusa de Ucrania y los eventos relacionados, que están “creando una presión alcista adicional sobre la inflación, y es probable que pesen sobre la actividad económica”.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, que volvió a su primera conferencia de prensa en persona en más de dos años, justificó la movida principalmente por la elevación de costos.
“Las acciones estaban entusiasmadas con el hecho de que Powell refute las conversaciones sobre aumentos de 75 puntos básicos y su optimismo por el alza de los precios”.
El jefe de la Fed dijo que las autoridades del banco central no están considerando “activamente” un alza de la tasa de tres cuartos de punto porcentual en las próximas reuniones de política monetaria.
“Un incremento de 75 puntos básicos no es algo que el comité esté considerando activamente”, afirmó Powell en respuesta a una pregunta en la conferencia de prensa.
Al final de la jornada, las acciones de Wall Street subieron con fuerza y los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense cayeron después de que Powell, aliviara la preocupación de que el banco central se embarcará en un ritmo más agresivo de ajuste monetario. Los operadores redujeron sus apuestas sobre la cantidad de ajuste que esperan para junio.
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo que espera un crecimiento sólido en el próximo año, con un posible “aterrizaje suave” para la economía a medida que la Reserva Federal actúa para reducir la inflación. “Creo que veremos un crecimiento sólido el próximo año”, dijo Yellen. “La Fed deberá ser hábil y también afortunada, pero creo que es una combinación posible”.
Varios economistas han pronosticado una recesión en 2023 a medida que la Fed aumente las tasas de interés, incluso con un aumento de medio punto porcentual anticipado. Pero Yellen dijo que “un aterrizaje suave es posible”. La jefa del Tesoro dijo que si bien los precios al consumidor han subido, las expectativas de inflación a mediano plazo no se han visto tan afectadas.
Las solicitudes iniciales se mantuvieron en 212.000 en la semana finalizada el 13 de abril según el Departamento de Trabajo
La encuesta encontró que también se observa una leve subida de los temores de inflación (0,3 puntos respecto al mes de febrero)
El aumento de las quiebras corporativas y precios del mercado inmobiliario son los principales retos, según dijo el organismo
