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Asunción del presidente argentino
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La atención se centra en la capacidad de Milei para avanzar en sus reformas y en la necesidad de revivir el acuerdo con el FMI
Los mercados argentinos, que subieron después de que el presidente Javier Milei asumió el cargo hace un mes, ahora le están aportando una dosis de realidad, con una corrección en los precios de los bonos, debilidad del peso e inversores preocupados sobre nuevas subastas de deuda.
El baño de agua fría de los ahorristas después de una luna de miel inicial subraya el enorme desafío que enfrenta Milei mientras busca controlar una inflación que se encamina hacia el 200% anual, creciente malestar social, escasas reservas en el banco central (BCRA) y negociación de un programa de 44.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
También enfrenta cuestionamientos legislativos a su llamada "ley ómnibus", con la que busca privatizar entidades estatales y elevar impuestos, en el Congreso, donde su coalición libertaria tiene una amplia minoría. Un decreto que desregula la economía también encontró obstáculos legales.
"La realidad le golpea en su propia cara", dijo el analista financiero Marcelo Rojas. "Sus intenciones son buenas, pero con eso no alcanza y es lo que se comienza a vislumbrar", agregó.
Durante las cuatro primeras semanas al frente de la presidencia, el peso se hundió un 55% ARS=RASL, la bolsa trepó el 14% .MERV, los bonos ganaron un 8% promedio, el índice del riesgo país se mueve en su máximo de siete semanas 11EMJ y las reservas del BCRA acumularon un saldo favorable de casi 3.700 millones de dólares.
La brecha entre las tasas del cambio oficial y las alternativas -usadas por muchos para sortear controles de capital- están volviendo a ampliarse después de una enorme devaluación en diciembre que las había recortado significativamente.
Los analistas le apuntan al Gobierno desafíos crecientes, ya que los ruidos políticos y jurídicos acechan, con la curva decreciente en el interés de la deuda soberana, inflación mensual pisando los talones del 30%, la brecha cambiaria volviendo a escalar, falta real de financiamiento y complicada deuda con los importadores, entre otras adversidades.
"El Gobierno comienza a enfrentar sus primeros obstáculos. La falta de músculo político se hace más evidente: el bono a los importadores no logra despegar y la brecha cambiaria se activó antes de lo esperado", dijo la correduría Cohen.
Y agregó que el decreto y la 'ley ómnibus' no tienen buenas perspectivas si el presidente se mantiene inflexible a cambios.
Sin embargo, el BCRA ha acumulado reservas netas en moneda extranjera desde la asunción de Milei y el índice bursátil porteño S&P Merval sube por coberturas, mientras la compañía petrolera estatal YPF YPFD.BA se ha visto sacudida por rumores de privatización.
MIRADA PUESTA EN INFLACIÓN
Todos los ojos están puestos en la economía, con una alocada inflación mensual y más del 40% de la población en la pobreza. El país, un importante exportador de granos, también está buscando revivir su enorme acuerdo con el FMI, que sería informado el miércoles, según un portavoz oficial, para desbloquear la séptima revisión del programa y acceder a unos 3.300 millones de dólares.
El economista Aldo Abram, de la Fundación Libertad y Progreso, dijo que la perspectiva del mercado dependía fuertemente del éxito o fracaso de Milei para avanzar con sus reformas. "Lo malo es que, como pasa actualmente, todas las noticias que puedan frenar los avances del Gobierno reactivarán la caída de la demanda de pesos, poniéndonos más cerca de la hiperinflación", dijo Abram. "Por otro lado, todo lo que lleve a confirmar el cambio de rumbo alentará la preferencia por los activos locales alejándonos de la crisis", concluyó.
Respecto al año anterior, el PIB de México creció 1,6% en el trimestre, por debajo de la previsión mediana que estaba en 2,3%
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El activo digital más grande se desplomó casi un 16% en abril, ya que la manía por los fondos se estancó después de haberlo elevado
