Marco Rubio visita el centro de mando de Gaza en Israel para reforzar el plan de paz

El secretario de Estado, Marco Rubio, expresó un optimismo cauteloso sobre la implementación del acuerdo de paz del presidente Donald Trump, que se ha visto afectado por el derramamiento de sangre en Gaza y la intriga política en Jerusalén, durante una visita a un nuevo centro de comando dirigido por Estados Unidos en el sur de Israel.

Rubio recorrió el viernes el extenso antiguo almacén que, la semana pasada, se ha convertido en el centro de operaciones para 200 miembros del ejército estadounidense y socios internacionales que trabajan en operaciones humanitarias, logísticas y de seguridad en Gaza. Su visita al lugar se produjo tan solo tres días después de la del vicepresidente J.D. Vance, mientras los principales lugartenientes de Trump buscan reforzar el acuerdo, que es una prioridad absoluta en política exterior.

Si bien Rubio afirmó que hay motivos para el optimismo, subrayó el arduo trabajo que queda por delante tras la liberación de rehenes y la retirada militar israelí a principios de este mes. Por ejemplo, el acuerdo exige que Hamás, designado como organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, se desarme y acepte un gobierno alternativo para la Franja de Gaza, que ha gobernado durante casi dos décadas.

"Habrá altibajos", añadió el secretario, de pie junto a dos carteles gigantes que mostraban en letras grandes el plan de paz de 20 puntos de Trump. "No vamos a dejar de presionar hasta que se cumplan todos los compromisos asumidos aquí", afirmó. Trump enfrenta un desafío importante para establecer una paz duradera en un conflicto que dura generaciones, donde varios predecesores invirtieron un capital político significativo en esfuerzos que finalmente fracasaron.

El Centro de Coordinación Civil-Militar, liderado por Estados Unidos y que Rubio visitó a unos 20 km (12 millas) de la frontera con Gaza, está comandado por un general estadounidense de tres estrellas. Se espera la colaboración de fuerzas del Reino Unido, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Catar. El embajador Steven Fagin, miembro de carrera del Servicio Exterior de Estados Unidos y embajador en Yemen desde 2022, será el responsable civil del centro, según informó el Departamento de Estado el viernes.

En los últimos días, Hamás mató a dos soldados israelíes en una emboscada en Gaza, e Israel llevó a cabo ataques aéreos letales, lo que aumenta los temores de que el acuerdo pueda fracasar. La visita de Rubio se produce después de que los rivales de derecha del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aprobaran por un estrecho margen un proyecto de ley de anexión de Cisjordania en primera lectura parlamentaria, lo que provocó la reprimenda estadounidense y arriesgó la ira de las naciones árabes cruciales para el acuerdo de paz. Trump también ha declarado que no permitirá la anexión israelí.

De cara al futuro, Rubio afirmó que podría ser necesario contar con la Fuerza Internacional de Estabilización multinacional que debe formarse para garantizar la seguridad en Gaza y el entrenamiento de una nueva fuerza policial palestina, aprobada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Algunos países exigen este paso para participar, añadió.

“La buena noticia es que nadie parece querer reanudar la guerra”, declaró Dennis Ross, quien fue enviado del presidente Bill Clinton a la región y ahora es miembro del Instituto Washington para la Política del Cercano Oriente. Aun así, “no habrá retirada israelí ni reconstrucción en Gaza si no hay desarme”, añadió.