Hoy se celebra el Día de los Veteranos en EE.UU. como homenaje a la firma del armisticio

El Día de los Veteranos tiene su origen en el final de la Primera Guerra Mundial. El 11 de noviembre de 1918, a primera hora de la mañana, se acordó el cese de las hostilidades entre los aliados y Alemania, aunque la medida solo entró en vigor a las once en punto. Ese momento fue interpretado como el fin de la guerra en todos los frentes, aunque no significó la rendición formal alemana, que se firmaría meses después con el Tratado de Versalles en 1919. Desde entonces, es una fecha muy importante para el mundo entero, y se conmemora de gran manera, especialmente en aquellos países que participaron directamente de la guerra

Un año más tarde, el presidente estadounidense Woodrow Wilson proclamó el 11 de noviembre como el Día del Armisticio, una jornada destinada a recordar el sacrificio de quienes lucharon y a reafirmar el compromiso de Estados Unidos con la paz. Con el tiempo, múltiples actos de homenaje se fueron consolidando, como el entierro del Soldado Desconocido en el Cementerio Nacional de Arlington en 1921. Este acto simbólico buscaba honrar a todos los combatientes cuyos cuerpos nunca fueron identificados.

En 1938, el Día del Armisticio se convirtió oficialmente en feriado nacional en Estados Unidos. Sin embargo, tras la Segunda Guerra Mundial, la dimensión del conflicto y la cantidad de personas que habían servido llevaron a replantear el sentido de la conmemoración. Fue entonces cuando comenzó a extenderse el concepto de reconocer no solo a los caídos, sino a todos los veteranos, independientemente de la guerra en la que hubieran participado.

En 1954, el Congreso aprobó cambiar el nombre de la fecha a “Día de los Veteranos”, estableciendo así una jornada dedicada a agradecer el servicio de quienes han formado parte de las Fuerzas Armadas. Durante un tiempo, la celebración se trasladó al cuarto lunes de octubre debido a una ley que buscaba unificar los días festivos, pero esa modificación fue rechazada socialmente y, en 1978, el feriado regresó a su fecha original: 11 de noviembre.

Actualmente, la ceremonia más representativa se realiza en Arlington. A las once de la mañana, una guardia conjunta de las distintas ramas militares rinde honores en la Tumba del Soldado Desconocido. El presidente de Estados Unidos coloca una ofrenda floral y se guarda un momento de silencio. Luego continúan los homenajes a los veteranos en otros espacios del cementerio y en distintas ciudades del país.

El Día de los Veteranos es hoy una ocasión para reflexionar sobre el papel de los militares en la historia nacional, reconocer su servicio y recordar los costos humanos de la guerra, sin enfocarse únicamente en una batalla o conflicto específico, sino en quienes han dedicado parte de su vida a servir.