Gobierno cerró el centenario diario La Nación de Chile

La concentración de la prensa escrita en dos grupos monopólicos se agudizó este lunes luego de que una junta de accionistas a la que asistió una mayoría de representantes estatales decidió el cierre definitivo de este diario, informaron los dirigentes del medio.

La Nación funciona solo como diario electrónico luego de que asumiera el gobierno derechista del presidente Sebastián Piñera, que concluyó con su edición en papel.

Los trabajadores del periódico y representantes del gremio periodístico presentaron casi de inmediato un recurso de protección ante los tribunales de justicia con la esperanza de anular la decisión.

También el accionista minoritario, la empresa Colliguay con un 30%, acudirá a la justicia en rechazo al fin del diario, que dejará 117 personas cesantes. "Vamos a seguir buscando todos los caminos para que este medio de comunicación siga existiendo", dijo Marcelo Castillo, presidente del gremio que agrupa a los periodistas chilenos.

Nancy Arancibia, dirigente de los trabajadores del diario, declaró que "el diario no va a desaparecer mañana, pero evidentemente la concentración de la prensa escrita se va agudizando más, porque no tienes ningún medio que sea disonante al de los dos conglomerados existentes hoy" .

Según cifras de la Asociación Nacional de la Prensa, el mercado de los medios escritos chilenos está concentrado en un 90% en los grupos periodísticos Edwards y Copesa, aseveró Castillo. "Eso significa vulnerar todos los estándares nacionales de transparencia de funcionamiento de los mercados", dijo. Agregó que "lo que se considera razonable es que en cada mercado no existan, ojalá, no más de cuatro actores, que controlen hasta el 80% de la propiedad. Aquí (en Chile) hay dos actores que controlan el 90% de la propiedad de los medios escritos".

Arancibia confió en que el recurso judicial sea acogido por la forma irregular en que se convocó la junta accionaria que votó el fin de La Nación. "Cerrar un diario en democracia, sin tener razones económicas ni políticas... es un atentado contra la democracia y la libertad de expresión realmente serio" , aseveró.

El senador Carlos Larraín, presidente del partido centroderechista Renovación Nacional al que pertenece Piñera, declaró que "es una muy buena noticia para la sanidad del periodismo terminar con la competencia estatal del periodismo libre". "Claro que es una decisión política, es política todo lo que tiene que ver con el empleo de los fondos del Estado. El periodismo subsidiado no sirve para nada", añadió.

La concentración de medios en Chile también se da entre las radioemisoras, donde el grupo español Prisa domina 70% de las radios.

Daniel Platovsky, presidente del directorio de La Nación, se excusó de opinar porque, dijo, las actas aún no están firmadas. Sin embargo, agregó que "no se trata del diario, es un problema de los accionistas de la sociedad. No puedo decir nada más ya que represento al Estado de Chile". La Nación sobrevivió durante 85 años y era el diario oficialista según el gobierno de turno, hasta que los últimos dos años, luego de cerrada su edición escrita, empezó a independizarse.