Del Canal de Panamá a Perú: envíos retroceden y esto se espera hacia fin de año

Decenas de barcos cargados de contenedores que hacen fila para cruzar el Canal de Panamá ilustran una crisis nunca antes vista en el país centroamericano, golpeado por una prolongada sequía que afecta la cantidad de agua en la vía de navegación interoceánica. Ante las preocupaciones por el atasco de buques y el recrudecimiento del fenómeno El Niño, Gestión conversó con un experto panameño en temas marítimos y logísticos, a la vez que contactó a funcionarios del mismo Canal para conocer cómo esta situación viene afectando los envíos hacia Perú y qué se espera hacia fin de año.

“Esta crisis es realmente difícil porque van a bajar los ingresos del Canal”, dijo el especialista Carlos González de la Lastra. “Esto ya ha pasado en dos ocasiones, pero no del nivel de ahora; porque el tráfico, el movimiento de carga, se ha incrementado”.

El istmo de Panamá, escasamente 80 km entre un océano del otro, economiza miles de kilómetros de navegación, ya que el 50% del costo de operación de un buque es el combustible que utiliza.

“Cualquier ruta alterna costaría unas 300 veces más que pasar por el Canal de Panamá”, subrayó González de la Lastra, quien fue uno de los miembros de la Comisión Presidencial para la transferencia del Canal de manos de Estados Unidos a una administración panameña.

El operador del Canal de Panamá dijo esta semana que no hay perspectivas inmediatas de alivio respecto a las condiciones de sequía, que han reducido los niveles de agua, paralizado el transporte marítimo y las cadenas de suministro globales.

“Este tema del agua era previsible y se han hecho muchos estudios, como el que dejó la administración anterior, para crear embalses especiales. Solo era asunto de empezar a construirlo. Lamentablemente, los estudios no fueron tomados en cuenta y se pidió al cuerpo de ingenieros del Ejército estadounidense, que fue el que inicialmente construyó el Canal, que hiciera una evaluación. Dicha evaluación llegó a la misma conclusión de los estudios, confirmando que eran correctos; pero, en el camino perdimos cuatro valiosos años para el comercio internacional”, anotó González.

“La noción del ‘just in time’ o llegar ‘justo a tiempo’ es a veces lo más importante en esta actividad porque la carga comercial debe ser prontamente distribuida entre los compradores, sobre todo por temas de estación como la proximidad de las fiestas navideñas. El movimiento de carga se hace muy grande porque almacenes más grandes tienen que estar preparados para un cambio de moda en la compra, y para eso el Canal se convierte en una empresa indispensable”, agregó el experto.

Restricciones hasta próximo año

El administrador del Canal de Panamá, Ricaurte Vásquez Morales, dijo el martes que las temperaturas altas del océano, una inusual temporada de lluvias y la persistencia del fenómeno climático de El Niño significarán que tendrán que seguir restringiendo el tráfico de las embarcaciones hasta 2024.

El tráfico diario se ha reducido de 36 a 32 tránsitos debido a la disminución de los niveles de agua dulce en embalses clave. Las continuas restricciones significan que el canal probablemente operará por debajo de su capacidad total en los meses previos a Navidad y al Año Nuevo chino, cuando generalmente está más ocupado.

Vásquez Morales precisó que si bien no es la sequía más severa que ha sufrido Panamá, dada la operación del canal, es la sequía más severa que enfrentan incluso con el nivel de operaciones que tienen actualmente.

Agregó que el canal mantendría niveles de calado en 13 metros, suficiente para alrededor del 70% del tráfico del canal, y que reduciría los espacios de tránsito si fuera necesario para mantener esos niveles.

Sobre este punto, González de la Lastra considera que con el cambio climático, este problema puede seguir repitiéndose sin necesidad de El Niño.

“Los estudios del clima indican que cada vez los océanos se llenan más de agua, pero el agua que corre por los ríos se va disminuyendo. Este es un canal de agua dulce, dependemos del suministro de agua y de tener los embalses preparados para la época en que menos llueve. En este momento estamos en la etapa que debemos empezar a hacer los embalses, pero son una solución a mediano plazo”, comentó el experto, quien sugiere volver “a los orígenes de lo que iba a ser un canal a nivel del mar”.

Respecto a la ampliación del canal inaugurada en el 2016, González dijo que esta ha sido un éxito pues ha permitido el paso de los nuevos barcos con capacidad de hasta 20,000 contenedores, aumentando así los ingresos del canal de una forma exponencial. “El canal no cobra por pasar barcos, el canal cobra por espacios de carga. O sea, a mayor espacio de carga, mayor costo del peaje. Esté cargado o no, el espacio de carga es lo que el canal toma en cuenta”, explicó.

Flujo mermado hacia Perú
Durante este año fiscal 2023 (octubre 2022 a agosto 2023), se registraron a través del Canal de Panamá un total de 9.9 millones de toneladas métricas con destino a Perú, una disminución de 12% respecto a similar periodo del año fiscal anterior, con 11.2 millones de toneladas métricas.

Las mercaderías que reportan caídas con destino a Perú son los productos derivados del petróleo transportados en buques tanqueros, como diésel, gasolina, crudo, querosene que en total disminuyeron 921,000 toneladas métricas respecto al periodo del año fiscal 2022, señaló el Canal de Panamá, en respuesta a consultas de Gestión.

“Adicionalmente, se registraron menores envíos de carga contenerizada y de productos transportados en buques graneleros como fertilizantes, carbón, granos misceláneos y trigo. Es importante mencionar que la carga del gas licuado de petróleo (GLP) ha aumentado en 1%, equivalente a 3,600 toneladas métricas”, dijo el Canal, agregando que los envíos a Chile también se han visto afectados.

“Chile es otro destino de la costa oeste de América del Sur que se ha registrado una disminución de la carga través del Canal en el año fiscal 2023, de 17% a respecto al mismo periodo del año fiscal 2022″, señaló.

Sobre la posibilidad de elevar sus tarifas para lidiar con esta situación, el Canal aclaró que su estructura de peajes se estableció el año pasado y se aplica sobre una base renovable cada tres años. “Los peajes de 2024 ya están fijados y se anunciaron el año pasado. Lo que es más dinámico y fluctúa en función del nivel de los lagos es el cargo por agua dulce”, explicó.

El Niño ‘intenso’
Una prolongada estación seca y el fenómeno de El Niño hicieron que el Canal de Panamá aplicara medidas a principios de año para ahorar agua, “con el fin de mantener altos niveles de fiabilidad”.

“Los aportes acumulados a la Cuenca Hidrográfica del Canal de Panamá de enero a junio 2023 ocupan la posición número 7, entre los más secos en 126 años. Se prevé un pico de intensidad del evento El Niño para los últimos meses del 2023. Aumentando las probabilidades de un adelanto en el inicio de la temporada seca 2024″, auguró el Canal.

Este pronóstico se hace eco de lo informado por la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de EE.UU. que señala que, al finalizar el trimestre de junio, julio, agosto (JJA) de 2023, El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) se ha fortalecido en su intensidad de débil a moderado.

Tras la discusión de los expertos se detalla que el océano Pacífico Ecuatorial continúa en una fase de calentamiento que progresivamente se está intensificando.

El fenómeno de El Niño nos pegó la vez pasada muy fuerte. Y ahora mucho más.

Carlos Ernesto González de la Lastra

“Desde el 10 de julio de 2023 las anomalías semanales de Temperatura de la Superficie del Mar (TSM) en la región Niño 3.4 han estado por arriba de +1.0°C. Adicionalmente, el comportamiento de la atmósfera se ha acoplado con las anomalías de TSM del océano Pacífico Ecuatorial, por lo cual al concluir el trimestre JJA de 2023 se habrá cumplido con los criterios establecidos para registrar este fenómeno de El Niño en la serie histórica. Es decir, que el trimestre JJA sería el tercer trimestre móvil con anomalías de TSM en la región Niño 3.4 iguales o superiores a +0.5°C”, indica el reporte de NOOA.

Se indica que la mayoría de los modelos internacionales de pronóstico del ENOS, tanto dinámicos como estadísticos, destacan con una alta probabilidad que el calentamiento del océano Pacífico Ecuatorial podría continuar durante los próximos meses con anomalías iguales o superiores +1.0°C. Además, existe una alta probabilidad de que El Niño sea fuerte entre los meses de noviembre de 2023 a enero de 2024.

Los modelos estadísticos de predicción de El Niño estiman que el fenómeno pudiera finalizar entre marzo y abril del próximo año. No obstante, los modelos dinámicos estiman que El Niño podría continuar presente durante el primer semestre del 2024.

Los años análogos definidos para el período de este informe de pronóstico, indican que los efectos de El Niño en Panamá pudieran estar disminuyendo entre mayo y junio de 2024.

El 2023 se ha caracterizado por el intenso calentamiento global de los océanos. El océano Atlántico Norte en los meses de junio y julio ha reportado altas TSMs sin precedentes. Los modelos dinámicos globales estiman que para los próximos meses el océano Atlántico continúe con temperaturas por encima de sus valores normales.

El Instituto destaca que se espera que dentro de los siguientes meses ocurran varios días consecutivos sin lluvia y pocos eventos con lluvias muy intensas.

En Panamá, El Niño ha impactado con una disminución de las lluvias y un mayor número de días consecutivos sin lluvia.

Las lluvias muy intensas que se han registrado han sido de corta duración debido al efecto indirecto de sistemas tropicales.

“Hay una preocupación en el país entero, así que los pasos que se deben dar ahora mismo de forma urgente es hacer los nuevos embalses. Pero pensando ya a largo plazo, lo necesario es empezar a trabajar en serio en la construcción de un canal a nivel del mar”, concluyó González de la Lastra.