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La compañía confirmó hoy que ampliará su operación en ese mercado, profundizando el derrumbe en las acciones de los competidores locales.
Amazon confirmó hoy oficialmente lo que los medios ya habían adelantado y todo Brasil estaba comentando como un secreto a voces. El gigante del retail online, que llegó a ese país hace cinco años, pero que hasta ahora se había limitado a la venta de libros, va a extender su operación en el mayor mercado de Sudamérica.
La ratificación no ha hecho sino profundizar el desplome de los actores locales del retail, a medida que los inversionistas anticipan un golpe en sus márgenes con la llegada del nuevo competidor, que está poniendo presión a las tiendas tradicionales en todo el mundo.
Desde que comenzaron a circular las primeras versiones, las acciones de Magazine Luiza se han hundido 15% y las de Via Varejo 10%. Pero también los competidores online están sufriendo, con Mercado Libre perdiendo 14% y B2W más de 18%.
De momento, las cadenas dominantes podrían encontrar cierto consuelo en el hecho de que Amazon precisó hoy que por ahora su expansión se limitará a la electrónica, y que no abrirá sus propias instalaciones de logística, por lo que dependerá de los vendedores en su plataforma de mercado para gestionar la distribución.
Sin embargo, el mayor impacto que Amazon podría tener en Brasil es la introducción de la política de devolución sin complicaciones, algo que es tabú para los minoristas brasileños, informó Bloomberg.
Aunque pedir un cambio de artículo es una gestión habitual y sencilla cuando se hace dentro del plazo estándar de 30 días y se tiene la boleta, la situación cambia radicalmente cuando se trata de pedir un reembolso, incluso entre los comercios de lujo. Y tratar de cancelar un pedido puede convertirse en una pesadilla.
Aunque venían sopesando las amenazas verbales, los mercados se enfrentan desde hoy a las consecuencias del ataque. Activos digitales, como el bitcoin, ya sintieron los efectos
Los precios subieron hasta 2,2% a US$10.702 la tonelada (un máximo histórico para el contrato más activo) antes de disminuir para cotizar un 1,7%
La pobreza y el bajo nivel de crecimiento del PIB fue la alerta que lanzó el Banco Mundial al comienzo de las reuniones de primavera junto al FMI