Los retos económicos del Presidente entrante en Ecuador

Ecuador comparte con Colombia no solo su frontera, sino también su dependencia del petróleo como su principal fuente de divisas, ya que alrededor de 33 % de las exportaciones ecuatorianas hoy en día corresponden a petróleo. Por lo anterior, la disminución del precio del crudo en 2014 tuvo consecuencias importantes en lo que tiene que ver con los ingresos en dólares de la economía y del gobierno. 

Al disminuirse los ingresos en una economía, se hace preciso apretarse el cinturón y gastar menos en bienes extranjeros, señal que normalmente se envía a través de una fuerte depreciación en el tipo de cambio, la cual hace que adquirir productos importados sea muy costoso. Sin embargo, en el caso ecuatoriano dicho mecanismo equilibrador no se pudo activar, dado que desde 2000 la economía de ese país se encuentra dolarizada. En otras palabras, en Ecuador no existe una moneda nacional sino que la moneda utilizada para todas la operaciones es el dólar estadounidense. 

De esta forma, para poder hacer las importaciones más costosas y forzar con esto una disminución en el gasto, Ecuador optó por el mecanismo de Salvaguardias, el cual es permitido por la Organización Mundial del Comercio (OMC) y que funciona como un establecimiento temporal de aranceles a los productos importados. Inicialmente el anuncio se hizo en 2015 con vencimiento en 2016, pero después del terremoto que afectó las regiones de Manabí y Esmeraldas, el mismo se prorrogó hasta mediados de este año. 

Por lo tanto, la primera tarea del presidente Moreno consistirá en buscar un reemplazo para estas salvaguardias o la renegociación de su extensión con la OMC debido a que, de otra forma, los ecuatorianos incrementarían su nivel de gasto en productos importados, haciendo que los dólares que se necesitan dentro del Ecuador para que funcione su economía, se vayan. 

La siguiente tarea en materia económica que tiene que entrar a solucionar el nuevo presidente tiene que ver con las cuentas fiscales. En ausencia de recursos petroleros, el gobierno ecuatoriano ha tenido que dejar de realizar proyectos de inversión, y la importancia de la inversión pública en la inversión total es tal que su disminución tiene mucho que ver con la recesión que sufrió el país el año pasado. No solo eso, sino que la ausencia de ingresos petroleros ha acelerado el tamaño del déficit fiscal lo que ha generado incrementos en el nivel de deuda pública. De esta forma, se hace necesaria una reforma fiscal que busque la optimización de los ingresos que se tienen lo cual debe incluir la búsqueda de nuevas fuentes de financiamiento y recortes en gastos de forma permanente. 

Ya de más mediano plazo, el objetivo de la política económica en Ecuador debe ser el de generar competitividad en sectores distintos al petrolero, de tal forma que dichos productos se puedan vender a bajos precios en el mercado internacional. En ausencia de una moneda propia, esta labor es tal vez, la que implica el reto más importante del nuevo presidente, ya que sin poder depreciar su moneda, las formas de bajar los costos de producción tendrían que considerar, por ejemplo, disminuciones en los salarios, algo que tendría el riesgo de ser muy impopular.

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